Tsuki Ga Michibiku Isekai Douchuu - Capítulo 205

Capítulo 205: Del Lado de la Sacerdotisa Durmiente

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“…Cierto. No conocí al Emperador en Gritonia, pero ya he conocido al Rey de Limia… así que debería haberlo sabido”.

Después de volver a la habitación de invitados que nos habían cedido, se me escapó un suspiro y una reflexión.

Mi cabeza estaba pesada como si algo pesara sobre ella.

Era una sensación como si hubiera estado estudiando durante mucho tiempo, y dejé de concentrarme un poco.

Tuvimos una audiencia con el rey de Limia, además de una charla con nobles (que probablemente eran influyentes).

En el momento en que llegamos a esta nación, ya estaba preparado para tener conversaciones con nobles, pero en Gritonia, los únicos con los que me encontré fueron la Princesa y el Héroe, así que en un rincón de mi mente, pensé que tal vez no me reuniría con el Rey.

Parece que con la excusa de haberlos salvado en Rotsgard, comenzaron una audiencia como agradecimiento.

Personalmente, quería ir a visitar a la sacerdotisa-san que se había derrumbado de repente, pero en esa parte, se negaron cortésmente.

Me molestó, pero no tuve más remedio que preguntar a Mio y Lime por su estado.

Gracias a mi experiencia en la audiencia con el Señor de los Demonios, pude superarlo de alguna manera, pero el número de nobles que vinieron a hablar después fueron más de los que esperaba, y me hizo sentir anormalmente cansado.

Hablé un poco con el Príncipe Joshua, y después de eso, pensé que Hibiki-senpai también tenía varias cosas de las que hablar, pero para mi sorpresa, no apareció.

Y también está la Casa Hopelace.

El señor feudal dijo que me esperaría en la Capital, pero me dio mala espina encontrarme con él.

Estaba tranquilo y me habló de las opiniones de otros nobles, así que en la superficie, tenía un ambiente de cooperación, pero…

A veces, me dirigía miradas desagradables.

Eso es lo que sentí.

No creo que fuera mi imaginación, y sentí que los nobles que estaban cerca de él también le dirigían una buena cantidad de esas miradas.

Hubo varios momentos en los que sentí que se mantenían a raya, y puede que sea tal y como dicen los rumores de que los nobles de Limia están enzarzados en luchas políticas.

Por ahora, en las conversaciones de hoy, no hubo ni un solo tema sobre la colocación de una tienda por parte de la Compañía Kuzunoha.

Hay muchas posibilidades de que el Gremio de Comerciantes de esta nación y los nobles ya hayan algún tipo de conversación. Esta era una suposición de Lime, pero creo que es correcto.

“Buen trabajo, Waka-sama”. (Mio)

“Buen trabajo, Jefe”. (Lime)

Mio y Lime; las dos estaban en la habitación y me dieron la bienvenida.

“Estoy de vuelta~. Senpai no estaba allí, pero la charla con el Rey y los nobles fue increíblemente agotadora.” (Makoto)

“Sobre la Sacerdotisa que preocupaba a Waka-sama, parece que vio una alucinación por exceso de trabajo”. (Mio)

“Sí, ahora mismo no le pasa nada y está tranquilamente durmiendo”. (Lime)

“Así que estaba cansada hasta el punto de ver alucinaciones… una chica tan pequeña… Senpai debe estar preocupada también”. (Makoto)

Siento que estar en el partido de los héroes del Reino de Limia es una carrera muy exitosa, pero ¿es un trabajo agotador?

Parece que Senpai está en primera línea en la guerra con la raza demoníaca, así que quizá sea un hecho.

En este mundo, los chicos trabajan como si fuera algo natural después de todo.

“Además, un mensajero vino y dijo que el Príncipe Joshua te está esperando. No es urgente, así que después de que hayas hecho tus arreglos, quería que le dijeras a la gente que está en el corredor”. (Lime)

“…Hey Mio”. (Makoto)

“¿Qué ocurre-desu ka?” (Mio)

“Sobre la sacerdotisa-san, me parece que se desmayó cuando nos vio a ti y a mí. No has hecho nada, ¿verdad?” (Makoto)

“No he hecho nada-desu wa. En primer lugar, de toda esa gente, ella fue la única que terminó así, ¿sabes? Aunque sea yo, no me desviaría de mi camino para dirigir mi hechizo a una niña pequeña”. (Mio)

“…Cierto, lo siento”. (Makoto)

“No es algo por lo que haya que disculparse. En primer lugar…” (Mio)

“¿Hm?” (Makoto)

“Waka-sama, Lime y yo no hemos hecho nada, así que el motivo debe estar de lado de ellos. Si esa chica estaba tratando de hacernos algo y terminó de esa manera, aunque sea una chica, sólo significa que recibió su merecido. Sea como sea, no es algo que merezca que Waka-sama se preocupe por ello”. (Mio)

Mio se reía suavemente.

Cuando está con Tomoe y conmigo, normalmente actúa de forma emocional, así que esto es inusual.

Parece tener mucha compostura, y cómo decirlo, parece tranquila.

Tenía la sensación de que en este viaje iba a depender de Lime, pero Mio empieza a parecer una persona fiable.

Los Arkes muestran un crecimiento notable, pero quizás Mio también sea así.

No creo que haya muchas conversaciones y decisiones complicadas en Limia, pero si llega ese momento, me alegro de que haya dos personas en las que pueda confiar.

“Esa chica puede haber hecho algo, eh. Es una Sacerdotisa, ¿Tiene un sentido especial o algo así, Lime?” (Makoto)

“En cierto modo… Uhm… creo que es experta en ver la esencia de alguien cuando lo ve”. (Lime)

“Esencia… algo que suena más misterioso. Por lo que vi en su mirada, no parecía que viera mi Armadura Mágica, ¿Es del tipo que ve cosas que otras personas no ven?” (Makoto)

“…Sí”. (Lime)

“Tal vez debería intentar preguntarle cuando la visite. Sería malo hacer esperar al Príncipe-sama, así que me iré pronto. Ah, no hay necesidad de que se queden cuidando la casa. Está bien si vuelven por la tarde”. (Makoto)

“Si ese es el caso, Waka-sama, iré a encontrarme con Hibiki-desu wa. Preguntaré por la Sacerdotisa en detalle”. (Mio)

“¿Mio sola?” (Makoto)

Senpai y Mio.

Aunque estemos dentro del castillo, me inquieta un poco.

“Entonces me llevaré a Lime conmigo. Parece que hubo un periodo de tiempo en el que estuvo con el grupo de Hibiki en Lorel después de todo. ¿Está bien? No hemos confirmado si está bien salir fuera, así que si es posible, sería mejor recibir el permiso para ello primero, y sería mejor ocuparse de los asuntos que podemos hacer dentro del castillo.” (Mio)

“…Sí, cuento contigo”. (Makoto)

¿Qué pasa con esto? Ella es realmente confiable.

¿Mio ha evolucionado?

No hubo ningún aviso de ello.

Es cierto que no hemos confirmado si está bien salir fuera.

Esto es malo.

Estaba pensando que estaría bien ya que esos dos pueden salir fuera fácilmente sin ser descubiertos por la gente del castillo.

Debería ser mejor recibir permiso para salir fuera en términos de orden eh.

Lo dejé pasar.

“Ve a hacerlo”. (Makoto)

“Sí, lo haré”. (Mio)

Todavía tenía una pizca de inquietud en mi cabeza, pero salgo de la habitación para dirigirme a donde está el Príncipe Joshua, y les cuento a los guardias mis intenciones.

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“Bueno entonces, vamos a encontrarnos con Hibiki, Lime”. (Mio)

“Nee-san.” (Lime)

“…¿Qué ocurre?” (Mio)

“¿Qué le hiciste a Chiya? ¿Qué le has enseñado?” (Lime)

Lime se decidió y preguntó, y Mio que tenía una sonrisa amable, entrecerró ligeramente los ojos.

“No hice nada. Nada en absoluto”. (Mio)

“Informé a Tomoe-neesan sobre los ojos de la Sacerdotisa. El jefe no parecía saberlo, pero Nee-san debería haberlo sabido, ¿no?” (Lime)

“Sí.” (Mio)

“‘Sí’, ¡¿dices?! No me digas, tú intencionalmente…” (Lime)

“Waka-sama no es tan bueno para expresarse sin palabras después de todo. Además… incluso si se enteran de mi identidad, sólo profundizará su comprensión de Waka-sama. No hay ningún problema-desu yo”. (Mio)

“La identidad… ¿es así? ¿No me digas que eres como Tomoe-neesan, un Dragón Superior?” (Lime)

Un sudor frío corría por el rostro de Lime.

No era un sudor agradable.

Cuando se involucró con Root y se enteró de la identidad de su superior directa Tomoe, se sintió orgulloso de no haber perdido la conciencia en ese momento.

Era una situación que no sería extraño si lo hiciera después de todo.

“Fufufu, no es eso, pero es algo parecido-desu wa. Además, está bien preguntarle a Hibiki sobre lo que vio esa chica. Yo tampoco sé lo que vio después de todo”. (Mio)

“Sólo lo que el Jefe, en serio”. (Lime)

Lime comenzó a interesarse por lo que Chiya vio en Raidou y Mio.

Solo como expresará lo que vio con esas abstractas palabras suyas.

“Waka-sama es un caballero que es como un gato tomando el sol. Sin maldad ni hostilidad. Aunque eso es sólo si no se le toca o se le despierta para su propia conveniencia”. (Mio)

“Sin embargo, la reacción de Chiya no parecía haber visto un gato lindo. Definitivamente”. (Lime)

“Entonces ella debe haber tenido una expectativa estúpida. Ah~, no sé qué poder es, pero sería conveniente que todos los hyumans tuvieran ese tipo de poder.” (Mio)

La gentileza desapareció, y Mio mostraba ahora una sonrisa que hacía sentir pavor.

“B-Bueno entonces, contactaré con Hibiki”. (Lime)

“No es necesario. Sabes dónde está, ¿verdad?” (Mio)

“Eh… sí. Tengo la información de Hibiki con esto, así que puedo saberlo”. (Lime)

Diciendo esto, Lime señala la katana en su cintura.

Lime había recibido una katana exclusiva para él de Makoto a través de Tomoe, que ha sido personalizada con una variedad de habilidades.

Esa es una de las razones por las que es capaz de saber la ubicación de Hibiki sin necesidad de investigar.

Lime le explica a Mio la ubicación de Hibiki.

Parece que Hibiki se encuentra actualmente en medio de la enfermería con Chiya.

“Esto es conveniente. Bueno, entonces, nos vamos. Vamos.” (Mio)

“¡¿Tan repentinamente?! Deberíamos al menos enviar una transmisión de pensamiento para…” (Lime)

“Ara. Para una persona a la que hemos entrenado, dado un arma, reparado, e incluso le hemos dado el crédito de varios logros, no hay necesidad de ser reservados-desu wa.” (Mio)

“…Eso…puede ser cierto pero…” (Lime)

Lo que Mio había enumerado era todo cierto.

Al alinearlo de nuevo, Lime sintió que habían hecho bastante por ella.

“Haré que Hibiki aprenda sobre Waka-sama en el tiempo de nuestra estancia. A la fuerza, eso es”. (Mio)

“Aprender del… Jefe”. (Lime)

Lime sintió algo siniestro por esas palabras.

Su instinto le decía que era peligroso.

“Bien, en primer lugar, tal vez debería hacer que ella lo acompañe a entregar eso”. (Mio)

Mio mira la bolsa que está tirada en una esquina de la habitación.

“…No me he enterado de los detalles, pero si no recuerdo mal, es el huevo de un Dragón, ¿verdad?” (Lime)

“Sí, parece que es el Dragón Cascada-desu” (Mio)

“Ya veo, el Dragón Cascada, es”. (Lime)

Lime definitivamente no entendió el significado de esto.

“Es un Dragón de la paz que fue derrotado por una simple Asesina de Dragones, pero haré que sea útil”. (Mio)

“…Cascada, Cascada… Dragón… ¿Asesina de Dragones? ¿Hah? ¡¿Haaah?!” (Lime)

“Hmph~, así que es aquí. La habitación donde la Dacerdotisa está durmiendo”. (Mio)

Lime finalmente pudo digerir las palabras de Mio, pero estaba en medio de mostrar varias emociones al expresarlas.

Mio se había tele-transportado despreocupadamente.

No es la sala médica.

Son las habitaciones privadas.

La limpieza estaba bien hecha, pero era una habitación que no parecía usarse tan a menudo.

En una parte de ese lugar, había una especie de instrumento religioso, y se podía adivinar que es la habitación de un sacerdote.

“¡¿Quién está ahí?!”

“Hibiki, soy yo. Parece que no estabas presente en el momento de la audiencia. Waka-sama estaba preocupado, por varias razones”. (Mio)

“Mio…-san. Y Lime también. Yo no les invité, y ustedes tampoco llamaron a la puerta pero, ¿Qué está pasando?” (Hibiki)

“No ha pasado tanto tiempo como para decir ‘ha pasado mucho tiempo’, pero bueno, me alegra ver que estás algo bien, Hibiki. Siento haber venido tan de repente”. (Lime)

“Lo siento, dices. Lime, tú…” (Hibiki)

“¿Cuánto cree que nos debes, señorita? Deja algo tan trivial como esto sin echarnos la culpa”. (Mio)

“Fuh~. Cuando dices eso, no puedo decir nada”. (Hibiki)

En la habitación de la Sacerdotisa, la Heroína Hibiki estaba allí.

La Sacerdotisa Chiya estaba acostada en la lujosa cama que tiene un pabellón.

En esa gran cama, sólo había un pequeño bulto.

“Parece que la Sacerdotisa todavía no se ha despertado. Waka-sama también estaba preocupado por ella. Dijo que quería visitarla más tarde, ¿Podrías por favor reservarnos un tiempo?” (Mio)

“¿Misumi-kun? Pero eso es…” (Hibiki)

“Parecía estar preocupado por si le había hecho algo. Aunque fueron ustedes los hicieron algo”. (Mio)

“…Ya veo. Así que lo escuchaste de Lime”. (Hibiki)

Lime recibe la mirada de Hibiki directamente.

No había prometido no decirlo o mantenerlo en secreto, así que no tenía porque culparlo, y al pensar en su relación, es alguien a quien ella le debe mucho.

Cuando no hay nada de qué avergonzarse, es natural mostrar una actitud confiada.

“Al fin y al cabo es mi trabajo”. (Lime)

“Bien. No te culparé por eso”. (Hibiki)

“Además, ¿No pensaste que vendríamos con una contramedida para eso?” (Lime)

“…Sí. Ya conoces los ojos de Chiya, así que no esperaba mucho”. (Hibiki)

Un ligero arrepentimiento se mostró en los ojos de Hibiki.

“Ahora bien, me pregunto qué habrá visto esta chica~. Estoy deseando escucharlo”. (Mio)

“¿No tomaste una contramedida?” (Hibiki)

“No había nada que se pudiera ver que pudiera molestarnos después de todo. Sólo pensé en ello como si me leyeran la fortuna gratis-desu wa”. (Mio)

Mio dice esto despreocupadamente.

“Qué espíritu robusto, como siempre. Es cierto que pensé que actuarías con más cautela”. (Hibiki)

“Fufufufu, Hibiki dice cosas muy divertidas-desu wa ne. Ara…” (Mio)

Al ver que la expresión de Hibiki se nubla ligeramente, Mio muestra una expresión de asombro.

“Querías saber sobre Waka-sama y nosotros, ¿verdad? Entonces alégrate. Gracias a la Sacerdotisa, has obtenido una valiosa información, ¿verdad?” (Mio)

“Hasta ahora, Chiya-chan ha visto a varias personas, pero no se perdió tanto como ahora. Puede que sea una información valiosa, pero como mi previsión era ingenua, la he hecho experimentar algo doloroso. No puedo alegrarme”. (Hibiki)

“Pensaba que te habías vuelto muy hábil en la conducción, pero parece que eres blanda de corazón cuando se trata de tus camaradas, como siempre. Qué tibia”. (Mio)

“Sólo esta parte, siento que es algo que no puedo tirar hasta el último momento. Pero Mio-san, tú me llamas tibia, pero parecía que Misumi-kun también era bastante blando de corazón con Mio-san y los demás…” (Hibiki)

Ella no dijo que no será capaz de tirarlo, pero se opuso a las palabras de Mio, y saca el tema de Makoto.

Es cierto que Makoto la trata de igual a igual, o más bien, de familia.

Hibiki que piensa que si están hablando de corazón blando, él también lo es.

“El punto de vista es diferente. Cuando se trata de una acción propia de la estatura de uno, no puede llamarse de corazón blando. Para Waka-sama, es una conducta que le sobra, pero para ti, sólo pasas de puntillas sin un sentido real”. (Mio)

“Dices eso. ¿Puedo escuchar tu fundamento?” (Hibiki)

“Eso es algo que tú misma deberías aprender”. (Mio)

“…¿Eh?” (Hibiki)

“Lime y yo no nos interpondremos. Waka-sama quiere ir a algún lago de Limia por un trabajo que le han solicitado. Ya que tienes la oportunidad, ¿Qué tal si vas a guiarlo? Cierto, Waka-sama y tú son “compatriotas”, así que vayan juntos solos”. (Mio)

“?!!” (Hibiki)

“Nee-san…” (Lime)

“Lime, mantén la boca cerrada. ¿Qué te parece, Hibiki? Si dices que vas a guiar a Waka-sama por ti misma, creo que estará bien considerar saldadas todas las deudas hasta ahora.” (Mio)

“…Dependerá del lugar al que quiera ir, pero por mi parte, puedo hacerme un tiempo. En primer lugar, estaba pensando en tener una larga charla con Misumi-kun”. (Hibiki)

Las palabras afirmativas de Hibiki hicieron que las cejas de Lime se arrugasen.

(Y sin embargo, la razón por la que no establecieron un lugar para hablar inmediatamente… fue porque mencionar la charla con los nobles primero, para reunir información y manipular las impresiones eh. Las probabilidades de que varios de los nobles le preguntaran algo a Hibiki son altas, y si Hibiki se reúne con el Jefe después de haber pasado por conversaciones incómodas, con las posiciones del Jefe y de Hibiki… Que se desmayará podría haber sido por casualidad, pero se convirtió en una buena excusa para nosotros. Mio-neesan, Hibiki no es tibia. ‘Algo que no puede tirar hasta el último momento’, es algo que se puede interpretarse como ‘que lo tirará cuando llegue el momento’, después de todo. Si vas a dejar al jefe y a Hibiki solos… al menos debería hacer posible que se entienda la situación. Tomoe-neesan también se molestó por ello después de todo). (Lime)

“He preparado la mesa de esta manera, así que Hibiki debería hacer algo para asegurarse de que Waka-sama sea capaz de ir al lugar que quiere. No importa donde quiera ir Waka-sama, tú que eres una Heroína, le acompañarás, así que debería ser fácil convencer a la gente de alrededor, ¿verdad?” (Mio)

“Él es un invitado que fue invitado por el Reino de Limia, pero sólo es un comerciante. Hay lugares en los que no puede entrar así que…” (Hibiki)

“…Hibiki, Waka-sama fue llamado aquí para expresar su gratitud por haber salvado a su Rey y Príncipe, ¿sabes? Algo como la postura pública, en realidad no me importa. Si vas a poner condiciones después de haber preparado todo esto-” (Mio)

“Hibiki, esas no son malas condiciones, ¿verdad? El Jefe no es alguien que cause problemas, y como eres una conocida suya, deberías saberlo, ¿verdad?” (Lime)

Lime interviene.

Porque él podía adivinar lo que Mio iba a decir después de eso.

Esas palabras habrían sido demasiado descuidadas y no deberían ser dichas. Aunque se sintió un poco agitado, lo sobrellevó con serenidad.

“…Entendido. Hoy sería imposible, así que será para mañana o pasado mañana. Me ajustaré a la necesidad de Misumi-kun, y lo guiaré. Seremos sólo Misumi-kun y yo, ¿de acuerdo?” (Hibiki)

Ella confirma con Mio, o más bien, ella estaba empujando su deseo.

Por la impresión de Hibiki, Mio odia que otras chicas se acerquen a Makoto.

Aun así, Mio estaba proponiendo que estuvieran en una situación en la que estuvieran solas.

Sería extraño no sospechar nada detrás de eso.

“Por supuesto-desu wa. Waka-sama ha estado cansado últimamente, así que por favor haz que se relaje. Te lo dejo a ti, Hibiki”. (Mio)

“Entendido. Haré lo que pueda. La chica aquí todavía está descansando así que…” (Hibiki)

“Por supuesto, hemos terminado nuestros asuntos. Volvamos, Lime. Ah, Hibiki, esta es una petición sin deuda de por medio. Lo que vio la Sacerdotisa, por favor, cuéntamelo también. Después de todo, estoy muy interesada en ello”. (Mio)

“Entendido, Nee-san”. (Lime)

“Te escuche, pero no puedo prometer nada”. (Hibiki)

Hibiki mira el lugar a donde esos dos se dirigían mientras desaparecían en la oscuridad, con una expresión seria.

Ella está tramando algo.

Ella era capaz de notar eso al menos.

No le ha contado a nadie lo de Makoto que se hace llamar Raidou, pero ha conseguido una pista, y es cierto que Hibiki quiere información de ellos hasta la desesperación.

Pero el ambiente ha sido preparado de sobre-manera.

Además, la reacción de Chiya fue irregular.

“…¿Qué demonios ha visto Chiya? A mí también me molesta. Si es posible, quiero saberlo antes de guiar a Misumi-kun, pero… me dijeron que es mejor esperar a que se despierte naturalmente después de todo…” (Hibiki)

Mirando a Chiya dormir, Hibiki deja escapar un pequeño suspiro.

Su mal presentimiento no desaparece.

El escalofrío que ha estado envolviendo su cuello desde el momento en que Chiya se derrumbó, preocupó a Hibiki.

Lime que había vuelto a su habitación de invitados, puso una expresión de cansancio frente a Mio.

Su aspecto de doblar la espalda era lamentable.

“Por favor, perdóname, Nee-san. A ese ritmo, Nee-san, habrías dicho que convertirías la capital en cenizas nada menos que a Hibiki, ¿verdad?” (Lime)

“Estaba ligeramente… molesta. Habría estado bien aceptar obedientemente los preparativos, pero tuvo que insistir y tratar de ser astuta. Como era de esperar, habría sido malo decir que iba a eliminar la capital. Me has salvado, Lime. Estaba a punto de incomodar a Waka-sama”. (Mio)

“Además, ¿no es malo dejar solos a Hibiki y al Jefe? Tomoe-neesan me ha pedido que…” (Lime)

“Lime”. (Mio)

“Sí, ¿Qué ocurre?” (Lime)

“No hay ningún problema”. (Mio)

Una afirmación.

“…¿No hay ninguno?” (Lime)

“Sí, ninguno”. (Mio)

“Enten… dido”. (Lime)

(No hay…de otra. Tendré que hacerlo con sigilo) (Lime)

Sin más remedio, Lime empezó a pensar en una forma de comprobar el estado de esos dos desde las sombras.

Pero…

“Si haces algo como mantener a esos dos a raya… haré algo interesante, Lime. Algo increíblemente interesante”. (Mio)

“…”

Lime se quedó sin palabras.

Desde el primer día de su estancia en el Reino de Limia, ya sentía que le envolvían nubes oscuras.

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El capítulo 205

 

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