Tsuki Ga Michibiku Isekai Douchuu - Capítulo 169

Capítulo 169: Entre un Puñado de Grandes Hombres, Él no está Incluido

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El caos en mi cabeza no se calma.

Para decirlo de forma sencilla.

Estoy muy asustado.

Se supone que los cuervos tienen garras y picos afilados en primer lugar, pero es del tamaño de un avión de pasajeros y de repente… No, espera, no es eso.

Son las tres personas (¿tres Dioses?), nuestros invitados, que se bajan de él.

A la izquierda, hay un anciano de piel ligeramente oscura que luce una sonrisa amable y tranquila.

Lo que impresiona es la bolsa y el mazo que cuelgan de su cintura.

En el centro hay un joven que lleva ropa hecha a medida al estilo Yayoi.

Una sonrisa cubre todo su rostro y parece estar de buen humor; esta persona es probablemente Susanoo-sama.

La de la derecha es una mujer. Es decir, probablemente sea una Diosa.

Al igual que el anciano de la izquierda, no puedo saber su nombre sólo con mirarla.

Con la luz que la ilumina por detrás, su cabello brilla de un color marrón claro. Probablemente los Dioses no se tiñen el cabello, así que supongo que éste es su color natural.

Por alguna razón, lleva un traje.

Tiene unos ojos brillantes y de aspecto inteligente, al combinarlos con su vestimenta, mi primera impresión de ella es que se parece más a una mujer de negocios que a una Diosa.

“Encantado de conocerte. Susanoo-sama, y sus honorables compañeros. Soy Misumi Makoto.” (Makoto)

Me preguntaba si debía decir “Si son tan amables de desembarcar”… Pero pensé que sonaría demasiado tedioso, así que me detuve.

Decidí hablar más directamente.

Por cierto, les hemos dicho que esperen hasta que Tomoe dé la señal.

Tomoe no lo estropearía.

Eso lo sé.

Pero son Dioses del mundo en el que viví y parientes de Tsukuyomi-sama. Pensé que si venían a visitarme, debía ser yo quien interactuara con ellos.

“Gracias por venir a saludarnos. Lamento que el líder de este “mundo” se desvíe de su camino por nosotros.” (Susanoo)

“¡En absoluto! Estoy en gran deuda con Tsukuyomi-sama, así que que te disculpes conmigo es…” (Makoto)

En serio.

Tsukuyomi-sama no ha hecho más que ayudarme.

Esta gente podría estar al tanto de la situación actual de Tsukuyomi-sama.

Considerando eso, es normal que haga esto.

El único nombre que conozco es el de Susanoo-sama, y esta persona tiene una imagen fuerte y salvaje, así que debe ser él, ¿no?

“No te encuentres tan tenso. No creo que hayas hecho nada malo, ¿sabes? E incluso si lo has hecho, no estamos en posición de encontrarte en falta por ello. Mmm, oh, lo sé. Probablemente lo puedes deducir de nuestra conversación anterior, pero soy Susanoo.” (Susanoo)

La persona que supongo que es una Diosa le da un codazo, lo que hace que Susanoo-sama se presente.

“Soy Daikokuten. Estás familiarizado con el Barco del Tesoro, ¿verdad?” (Daikokuten)

El anciano se presenta como Daikokuten.

Ah, la bolsa es un saco y el mazo es lo que se ve que tiene en la mano.

[Nota: Daikokuten es uno de los siete Dioses de la fortuna de la mitología japonesa, el Dios de la riqueza. A menudo se le representa sosteniendo un mazo dorado, sentado sobre sacos de arroz. El Barco del Tesoro es el barco que transporta a los Siete Dioses de la Fortuna.]

Ya veo.

¿Hmm?

Había algo sobre Daikokuten, qué era, creo que estoy olvidando algo más que es sorprendente sobre él…

Es inútil, no puedo recordar.

Es un poco más oscuro de lo que se ve en las fotos y sus lóbulos de las orejas son más pequeños de lo que pensaba, pero tiene un aire tranquilo que es apropiado para uno de los Siete Dioses de la Fortuna.

Es un Dios de aspecto amable. Pero tengo un sentimiento ligeramente incómodo hacia él, aunque esté asociado con Susanoo-sama.

“Soy Atenea. En algunos lugares me llaman Palas Atenea. Soy una Diosa de Grecia, un país muy al oeste del tuyo.” (Atenea)

Esta onee-san se presenta como Atenea.

Ella no tiene el cabello violeta.

Eso es algo bueno.

A diferencia de Daikokuten-sama, ella es completamente diferente a como me la imaginaba.

Es una mujer de negocios.

Llevar gafas le vendría bien.

No sé por qué está con Susanoo-sama.

De momento, hago una reverencia y empiezo a guiarles hacia mi casa para invitarles a entrar.

Por el camino, parecen interesados en Asora y parece que la admiran. A veces preguntan varias cosas al respecto.

Tomoe y yo respondemos a sus preguntas, pero aunque pregunten por el origen de Asora, no podemos darles una respuesta.

Sólo podemos explicar que parece haber aparecido cuando Tomoe y yo hicimos un contrato de Dragón.

“Por favor, discúlpanos; su visita ha sido muy repentina, así que nuestra hospitalidad no está del todo preparada. Sin embargo, nos apresuramos a terminar los preparativos.”

Después de todo, es imposible preparar una comida o un banquete adecuado tan rápidamente.

Me doy cuenta cuando llegamos al ver que todos se mueven con prisa.

Por ahora los conduzco a la sala más grande, que se utiliza para las asambleas.

“Sigo diciéndoles que no se preocupen. Han creado una ciudad interesante, ¿verdad? Es realmente interesante.” (Susanoo)

“En efecto. Y sólo la idea de preparar un banquete es suficiente para hacernos felices.” (Daikokuten)

“Realmente. Y todos están trabajando duro. Me hace sentir bien verlos.” (Atenea)

“Muchas gracias. Y así es… ¿Había algún asunto en particular que querían atender hoy? Si querían hacer algo, lo prepararemos lo mejor que podamos.” (Makoto)

Al principio su conversación parecía como si se hubieran pasado por allí, pero no creo que sea sólo eso.

“¿Hmm? La mayor razón es que vinimos aquí fue porque estoy interesado en Misumi Makoto a quien mi aniki le hizo peticiones, ¿sabes?” (Susanoo)

“Si nos preguntas si tenemos algún otro asunto aquí, bueno, hay algunos pequeños asuntos.” (Daikokuten)

“Sólo quería probar a venir aquí una vez. Ahora que lo veo con mis propios ojos, Asora es realmente interesante; un lugar de infinita curiosidad. Aunque creo que deberíamos mantenerlo oculto a esa persona.” (Atenea)

Las cosas que los Dioses consideran “asuntos pequeños” son asuntos serios para la gente.

Lo sé por lo que ocurrió cuando la Diosa de este mundo durmió una vez.

Aunque tengo la sensación de que no fue la causa principal de los acontecimientos, sino la gota que colmó el vaso.

“Parece que aún necesitaremos más de tu tiempo para completar nuestros preparativos, así que sería útil que me informara sobre estos pequeños asuntos que mencionas. Ah sí, podríamos ofrecer un tour por Asora, si a Atenea-sama le interesa…” (Makoto)

“Yo y el viejo Daikoku le hemos traído un regalo. Atenea tenía un sermón un poco duro y un collar para esa chica estúpida.” (Susanoo)

“Susanoo-dono.” (Atenea)

¿Collar?

Inmediatamente después de escuchar sus aterradoras palabras, Atenea-sama mira a Susanoo-sama con ojos afilados y habla con voz fría.

A-asusta.

“Oh, ooh. Lo sé. No diré nada más.” (Susanoo)

“Ufufufu. Ah, Makoto-dono. Me gustaría aceptar tu oferta de guiarme por Asora.”

“Bueno, entonces haré que Tomoe te guíe. Tomoe, ¿Podrías acompañar a esta dama por Asora? Es una Diosa de verdad, a diferencia de la otra, así que asegúrate de ser educada.”

“Entiendo. Entonces, Atenea-sama, por aquí, si quieres.”

Al ver que Tomoe invita a Atenea-sama, me acuerdo de advertirle.

No tengo otra opción.

Decirlo en voz alta sería más que grosero, así que usaré la transmisión del pensamiento.

“Además, Tomoe. Es una persona celosa en cierto modo, así que asegúrate de no atreverte a hacer nada ni siquiera cerca de retarla a una competición. ¿Entiendes? No debes hacer eso en absoluto”. (Makoto)

“Como desee.” (Tomoe)

“También es una Diosa de la guerra, así que empieza por llevarla a los Lagartos de la Niebla”. (Makoto)

“Entendido.” (Tomoe)

Eso debería estar bien.

Ahora, con Susanoo-sama y Daikokuten-sama, yo…

Mientras Atenea-sama y Tomoe salen de la habitación, giro la cabeza hacia atrás.

Veo a Susanoo-sama y a Daikokuten-sama con sonrisas en sus rostros.

Un Dios de la destrucción, un Dios de la fortuna y una Diosa de la guerra, eh.

Es una combinación un poco extraña.

Especialmente Daikokuten-sama.

Quiero decir, es un Dios de la fortuna, ¿no?

Es un Dios multicultural que aparece en el budismo, el budismo esotérico e incluso en la religión sintoísta.

Según una teoría, está en la misma categoría que Ookuninushi-sama, por lo que creo que probablemente sea un dios importante.

…

…

Mahā… kāla.

¡Yo… yo… ahora lo recuerdo!

¡Daikokuten es Shiva!

¡Es un Dios de la destrucción!

Un Dios que tiene innumerables leyendas escritas sobre él, ¡Un Dios que podría literalmente volar un país entero en un solo aliento!

He estado precavido sobre todo de Susanoo-sama; dirijo lentamente mi mirada hacia Daikokuten-sama.

Él me sonríe.

“Err, Daikokuten-sama. Tú eres Shiva-sama, ¿no?” (Makoto)

“Oh, a mí también me llaman así. Makoto-dono, eres japonés, así que pensé que estarías más familiarizado con el nombre Daikokuten. Estás muy bien informado, ¿verdad?” (Daikokuten)

“Muchas gracias…” (Makoto)

Mi voz es ronca al final de mi frase.

Creo que la mayoría de los japoneses no serían capaces de nombrar a todos los Siete Dioses de la Fortuna, pero la mayoría de la gente habría oído hablar al menos de Shiva, Daikokuten-sama.

Personalmente creo que Fukurokuju y Juroujin son los más difíciles de recordar.

“Hey, Makoto. Dices cosas inteligentes, ¿no?”(Susanoo)

“¿Eh?” (Makoto)

“”Es una persona celosa, así que no la retes a una competición”, ¿eh? Gajajajajaja!” (Susanoo)

No puede ser.

¿La transmisión del pensamiento se filtró?

¡!

¡¿Incluso a Atenea-sama?!

“El sermón de la señorita Atenea es duro, pero no tiene malicia; estoy seguro de que te perdonará.” (Daikokuten)

Incluso fue escuchado por Daikokuten-sama.

Yo-yo he ido y he dicho algo sorprendente.

“Por cierto. Si quisiera, sería sencillo ver en la mente de una persona. En tu caso, estarías bien contra alguien como Atenea, pero sería imposible que mantuvieras tu mente cerrada contra alguien como yo, Aniki o este anciano.”

¿Eeeh?

“Cuando alguien capta mi interés, no puedo evitarlo. La magia “Telepatía” que utilizas, la transmisión del pensamiento, ¿Es así? Incluso sin eso, puedo ver todo. También me preocupan las delgadas sombras de Fukurokuju y Juroujin.” (Daikokuten)

Vaya.

Los Dioses son increíbles.

Ellos también encontraron a Asora tan fácilmente.

Los Dioses del mundo en el que viví, son realmente sorprendentes.

“Parece que he sido grosero en varias cosas.” (Makoto)

“Más importante aún. Makoto, ¿No te estás acercando a la muerte estos días?” (Susanoo)

“N-no?” (Makoto)

Qué pasa con esto, de repente.

“Ya veo. ¿Nada como un dolor de cabeza repentino? ¿Sangrados de nariz que no paran?” (Susanoo)

“… tengo de esos.” (Makoto)

Es de cuando recibí el poder de ese maldito insecto.

Pero estar cerca de la muerte…

Sólo con pensar eso, supongo que se les transmite.

“… Ya veo, eso es. Estaba pensando en darte un poder a ti también, pero. Me preguntaba por qué llevas tanto poder que estás a un paso de morir. Anciano, ¿Puedes notarlo?” (Susanoo)

…

Estoy escuchando algunas palabras peligrosas.

Daikokuten-sama me mira fijamente.

“Esa chica, ¿Qué tan tonta es? Le dimos cinco o seis cosas para que las manejara en este mundo, pero tal vez deberíamos retirarlas todas y dárselas a nuestro Brahma.” (Daikokuten)

[Nota: Brahma es el Dios hindú de la creación]

Daikokuten-sama deja escapar un fuerte suspiro; supongo que está exasperado por lo tonta que es la Diosa.

Eso es bueno.

En cuanto a los Dioses, parece ser un fracaso.

“¿Y? ¿Qué pasa con Makoto?” (Susanoo)

“Está cerca de la muerte. De hecho, es sorprendente que no esté ya muerto. La tensión superficial es tal que apenas se mantiene con vida. Incluso es una Diosa con el poder de la creación; qué tonta. Ella acaba de presionar el “Dominio del Poder de las Palabras” en una persona ordinaria.” “(Daikokuten)

“¿Dominio del Poder de las Palabras?” (Makoto)

¿Podría estar hablando del poder que me permite entender el lenguaje?

“Dominio” suena bastante bien, pero…

Además, parece que realmente soy una persona corriente.

No, espera, si soy una persona ordinaria en la escala de Daikokuten-sama, en realidad podría ser una persona bastante sorprendente.

“Es comúnmente conocido como uno de los poderes que otorga entendimiento. Es un poder que te permite comunicarte con cualquier persona. Es un poder “raro” que sólo poseen unos pocos grandes hombres.” (Daikokuten)

“Sólo le pedí a la Diosa que me hiciera capaz de hablar con los hyumans, no es una habilidad increíble como esa -” (Makoto)

Ah.

En realidad, el poder que obtuve primero de la Diosa me permitió comunicarme con todos los demás que no fueran hyuman.

Y luego, le pedí que me permitiera comunicarme con los hyuman.

Lo que significa que ahora puedo comunicarme con todos.

“Ya veo. Esa chica es buena para encontrar atajos. De hecho, si se elimina la capacidad de comunicarse con una sola especie del “Dominio del poder de las palabras”, se convierte en una capacidad de comprensión normal. Qué método tan poco limpio.”

“Así que, ¿Cuál es el problema? ¿Está bien Makoto?” (Susanoo)

“Es mejor que renuncies a darle un poder tú mismo. Makoto-dono está lleno del poder de los Dioses hasta los límites de su cuerpo. Si estoy en lo cierto, Makoto-dono, has estado aumentando la capacidad de tu poder mágico?” (Daikokuten)

“Sí, creo que sí.” (Makoto)

“En ese caso, deberías hacerlo varias veces más. Y luego trabajemos para contener de alguna manera este poder dentro de esa alma tuya.” (Daikokuten)

“Muchas gracias. Sin embargo, parece tener el efecto de expandir a Asora, así que me he abstenido de hacerlo últimamente.” (Makoto)

“Susanoo, Atenea y yo nos encargaremos de que este mundo no llame la atención de la Diosa, así que no hay que preocuparse por eso. Puedes expandir este mundo sin tener que preocuparte por esas cosas. Si se convierte en algo muy grande, haremos una visita de vuelta aquí.” (Daikokuten)

¿No es un gran problema si este mundo se expande?

En realidad ni siquiera consideré la posibilidad de que este mundo fuera descubierto por la Diosa.

Aunque sería tranquilizador que se aseguraran de que no podrá encontrarla.

“Esa tonta de Diosa. Ella está haciendo trabajar a gente que ni siquiera está con ella.” (Susanoo)

Tienes toda la razón.

Estoy completamente de acuerdo con sus palabras, Susanoo-sama.