Vermillion - Capítulo 112
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Capítulo 112: Gloria [2]
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Todos se dedicaron a adular a Kei. Engreído aún más, Kei siguió añadiendo pedidos, mientras muchos otros disfrutaban de su buena voluntad. Aileen hizo un “oh, vaya” a su lado, pero no tuvo tan poco tacto como para detenerle.
En medio del alegre ambiente, el tabernero con cara de enano gritaba encantado “¡Necesitamos más bebida!”, mientras Jamie y otros empleados corrían afanosamente de un lado para otro, atendiendo a los clientes.
“Aun así, me pregunto si ese arquero de las finales estará bien”.
“Oh, ¿Él?”
Volviendo al tema de las finales, Kei preguntó a Dagmar, que respondió con cara de triunfo mientras se cruzaba de brazos.
“Parece que su hombro derecho se desgarró bastante. Gracias a que se rindió enseguida, y a que habían preparado expresamente a un sanador de alto nivel para curar a los concursantes, consiguió aferrarse a la vida. Al parecer, se ha recuperado por completo sin que le quede ni un solo rasguño”.
“Ya veo, es estupendo oír eso”.
“Dicho esto, incluso con sus heridas desaparecidas, la sensibilidad en su brazo aún no ha vuelto. Parece que incluso tendrá que renunciar al ejército”.
“Oh, ya veo…”
Mientras Kei murmuraba con expresión triste, le pusieron delante un plato de pinchos.
“…Tus sentidos a menudo no vuelven una vez que sufres una herida”.
Siguiendo el grueso brazo hacia arriba con la mirada, los ojos de Kei se encontraron con la cara de un enano que llevaba un delantal: Derrick.
“A mí también me alcanzó una flecha en el pasado… gracias a eso, actualmente me encuentro en este lamentable estado”.
Derrick dio una palmada con su rodilla derecha para dejar claro su punto de vista. Así que por eso cojeaba, Kei estaba convencido.
“¿Así que tú también eras un guerrero?”.
“Más que un guerrero, un mercenario sería más exacto”.
Derrick apartó la mirada mientras se rascaba torpemente la nariz.
“En realidad era bastante famoso cuando yo era un mocoso”. Dagmar, por su parte, acercó la cara agachándose y habló alegremente como si hablara de sí mismo.
“Era un luchador de poder natural. Durante la campaña militar llegó a demoler muros de fortalezas con su hacha. Si hablas de Derrick Nariz Roja, que trabajó a las órdenes del Gigante Denner, no hay nadie por estos lares que no sepa a quién se refiere”.
“¡B$stardo, llámame así una vez más y te arrancaré la lengua!”
El comentario de Dagmar provocó que Derrick gritara con las venas abultadas en la frente.
Parecía bastante cabreado, pero la expresión sonrojada hizo que su nariz roja resaltara aún más, haciendo que Kei y Aileen expulsaran su alcohol. Mientras los dos se daban la vuelta, tapándose la boca: “S-siento eso, viejo, se me escapó…”. Dagmar trató de apaciguarlo con una leve sonrisa en el rostro.
“…P-Pero en fin, ya estuve a su cuidado cuando era un mercenario novato. ¿Verdad, viejo?”
“Sí, este chico solía ser un mocoso en aquel entonces. Cuando lo llevé por primera vez al campo de batalla, olvídate de los mocos, incluso se meó-”
“¡Agh! ¡Espera! ¡Por favor, no saques esa historia!”
Dagmar comenzó a entrar en pánico debido a la revelación de su pasado inglorioso que en realidad había comenzado él mismo.
“¡Estamos comiendo aquí!”
“¡Dejen esa asquerosa charla para más tarde!”, vinieron abucheos de las otras personas, que empezaron a lanzar platos de madera y restos huesudos a Dagmar por alguna razón.
“Ouch, ouch… por qué yo…”
“¡HEY! ¡B$stardos, dejen de desperdiciar comida! Además, ¡Dejen de ensuciar la tienda!”
“¡Oh mi$rda, Nariz Roja está cabreada!”
“¡Corred!”
“Grrr, ¿Quién de ustedes ha dicho eso, huuh? ¡Os voy a dar una paliza!”
Derrick se arremangó con los ojos inyectados en sangre y cargó hacia la fuente de la voz.
Junto con los sonidos de sillas volcadas y platos rotos, también llegaron chillidos y gritos furiosos, “¡Eeeekkk!”
“¡Así que fuiste túuu!” La fiesta acababa de empezar, pero el lugar ya se estaba convirtiendo en un pandemónium.
“Arggh, ¡Yo también quiero divertirme!”
Mientras el tendero se enzarzaba en una trifulca, Jamie tenía las manos llenas de jarras de cerveza, y los ojos se le habían llenado de lágrimas. Esquivó hábilmente las manos de los viejos p$rvertidos que intentaban manosearle el culo y miró con reproche a Kei, la raíz de todos los males.
Kei por su parte observaba la refriega de Derrick mientras reía con una copa en la mano. Era una trifulca lo suficientemente grande como para que alguien pudiera haber resultado herido, pero teniendo en cuenta cómo seguía riendo, parecía que el alcohol ya había hecho su trabajo.
A la izquierda de Kei, Aileen se agarraba a su brazo, mientras que a su derecha, Edda se peleaba con ella.
“……”
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