Tsuki Ga Michibiku Isekai Douchuu - Capítulo 71
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Capítulo 71: Anillo
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“¡Tomoki, Iwahashi Tomoki! Espera, ¡¿No estabas escuchando?!”
“¡Lo he oído y entendido todo! ¡El momento en el que el enemigo tiene la guardia más baja es justo ahora, cuando nuestra retaguardia está retrocediendo lentamente! ¡Te abriré el camino así que cállate!” (Tomoki)
El dragón toma la delantera y el grupo de Hibiki lo persigue.
“¡La retirada aún no ha terminado y si hacemos algo como comenzar la batalla de nuevo sólo ampliará el daño de las unidades! El enemigo ya se ha desplegado y está esperando, ¡no se puede esperar tanta negligencia por su parte!” (Hibiki)
“¡Si hay sólo un poco, es suficiente! Estamos en el campo de batalla. ¡Todo el mundo está preparado para morir! ¡Hibiki-san, eres demasiado blando!” (Tomoki)
“¡No te andes con rodeos! ¿Qué intentas conseguir aumentando el caos en tu propio equipo? Deberíamos encontrar las rutas de escape posibles y ver cuántas unidades podemos utilizar…” (Hibiki)
“¡Caramba! ¡Eres ruidoso! ¡¿No lo entiendes?! ¡Un héroe es una figura y eso servirá de salvación! ¡Así se salvará más gente! ¡Es obvio que es más beneficioso! ¡Somos especiales! ¡Los elegidos! Si dices que quieres morir, haz lo que quieras. No me importa esa autosatisfacción. Haré tu parte como héroe en Limia también, ¡así que no te preocupes!” (Tomoki)
El grupo de Hibiki está tomando el camino donde la retaguardia debe retirarse y Tomoki está montando un dragón para movilizarse. Su velocidad natural es clara y la distancia entre ellos se amplía lentamente.
Las palabras ya no alcanzan. En el camino que han tomado sólo hay ruinas calcinadas. Incluso si su velocidad no puede ser comparada con la de cuando están luchando, la diferencia entre un dragón y una persona no puede ser llenada tan fácilmente.
“Qué tipo. ¿No es alentar a las tropas, estar en el campo de batalla como abanderado, la forma en que debe ser un héroe? Que intente salvarse a sí mismo sin importar lo que pase. No aprobaré eso” (Hibiki)
“Pero Tomoki-dono también tiene razón. Si te perdemos, Hibiki, en esta batalla, los miles de personas que podrías haber salvado ya no se salvarán. Tu vida es mucho más importante que los cientos de soldados que queremos salvar aquí” (Naval)
“Naval, cállate. No quiero escuchar más. No voy a preguntar. Porque todavía quiero seguir siendo tu compañero” (Hibiki)
“Hibiki-dono…” (Bredda)
Hibiki mueve la cabeza horizontalmente ante las palabras de Bredda.
“Este es un camino como héroe. Entiendo que eso es lo que quieres decir. Que nuestro trabajo es sobrevivir a cualquier precio. Pero eso no me gusta. También se puede llamar a esto una forma de sobrevivir en una situación fatal. En medio de la lucha contra el general enemigo, si hay una apertura en algún lugar, vamos a escapar de inmediato. Eso es lo que también estoy pensando. Aunque sé que es un pensamiento optimista” (Hibiki)
Sabe que es una forma de pensar bastante optimista, aun así, no quiere decir que es completamente inútil directamente de su boca. No se ha hecho un reconocimiento decente. Entonces, al menos quiere tener esta esperanza. También es la ingenuidad de Hibiki que fue criada en la sociedad moderna.
“No cambia el hecho de que tengamos el extremo corto de la paja, pero alguien tiene que hacerlo. Existe la posibilidad de que el general demonio rodee a las tropas restantes. Si me dices que esa es la responsabilidad de un héroe, sin duda es cierto. Yareyare” (Wudi)
Wudi. Puede que haya visto el camino del héroe en las acciones de Hibiki, parece que se había resuelto a lo que iba a venir.
“Haré lo que pueda. No me caeré en el medio como la última vez”. (Chiya)
Chiya. Recordando la vez con la araña negra cuando abandonó y dejó a Hibiki sola, saca su espíritu de lucha.
“Lo siento, el héroe que elegí es Hibiki. Te acompañaré hasta el final” (Naval)
“Yo también, no seré derrotado tan patéticamente como la última vez. Nosotros somos los cinco que empujamos la calamidad. Algo así como un general demonio, seremos capaces de lidiar con él de alguna manera” (Bredda)
Naval y Bredda.
Tomoki, mientras quema a las tropas demoníacas con un poder de fuego abrumador, ralentiza su paso y Hibiki confirma su ubicación.
¿La está esperando, o simplemente tiene dificultades? No importa cuál sea, ella no aceptará las formas de ese héroe. Eso es lo que Hibiki decidió.
Aumentando su ritmo, la chica corre por la suave pendiente y encuentra a un soldado mensajero. Ella se dirige hacia donde está él.
“¡Este es el héroe-sama! Tal y como se nos ha ordenado, ¡hacemos que todas las tropas se retiren!”
Sintiéndose profundamente conmovido por el hecho de que una persona descendida del cielo, el héroe, le acaricie el hombro, el joven soldado mensajero le devuelve un saludo erguido y firme.
“Gracias por tu duro trabajo. Siento los continuos cambios pero, quiero que envíes un mensaje a los generales de cada unidad. Para que detengan la retirada y se reorganicen en silencio. Yo y el héroe de Gritonia abriremos un camino para escapar así que sígannos” (Hibiki)
“Eso es…”
“Lo entiendo. No pueden cambiar sus movimientos tan constantemente. Pero por favor. También, dile lo mismo al Imperio. En este tipo de situación, no hay Imperio ni Reino. Definitivamente vamos a abrir nuestro camino” (Hibiki)
“… ¡Sí, entendido señora!”
Respira profundamente y lo exhala lentamente.
Viendo al hombre que corre y se apresura a difundir el mensaje, Hibiki respira profundamente.
Cerrando silenciosamente los ojos, en lugar de reanudar su respiración, visualiza el futuro. Este es un hábito que hace siempre que está a punto de tener un combate con un oponente fuerte en kendo.
“¡Vamos!” (Hibiki)
El grupo de Hibiki corre por el camino lleno de cadáveres que Tomoki ha abierto. Es molesto, pero este tipo de poder de destrucción merece una mención especial, es lo que piensa la chica. Esta es una hazaña que Hibiki no sería capaz de lograr. Al menos no en este corto espacio de tiempo.
Teniendo en cuenta la movilidad del dragón llamado Mora, junto con la robusta defensa de Ginebia que lo está montando, la alta potencia de fuego de Tomoki que está utilizando tesoros sagrados, y también el que está proporcionando apoyo a la defensa de Ginebia y a la potencia de fuego de Tomoki, el que utiliza un almacén de réplicas y produce golems en masa con alquimia, Yukinatsu.
Su figura a la hora de destruir las barreras que los demonios crean con el excedente y de seguir adelante es feroz. Mientras sus barreras no puedan resistir, significaría que los únicos que podrían detener su avance es alguien que tenga una buena cantidad de poder. En resumen, esto significa que son capaces de brillar indefinidamente contra estos soldados demonio.
Cuantos se sienten incómodos por el hecho de que este hombre solo abre este camino para obtener su propia seguridad. Esto es lo que pensó Hibiki mientras miraba hacia atrás.
“¡Estos son los dos últimos!” (Tomoki)
Incluso la unidad que estaba delante del general de 4 brazos y que empuñaba un equipo de clase relativamente alta estaba siendo quemada por la luz de corte mejorada que estaba siendo disparada por la lanza de Tomoki. Y la llamarada que exhalaba Nagi también picaba a los soldados que intentaban acercarse. Parece que estaba escupiendo una hoja de viento invisible.
Los que pensaron en agarrar al dragón volador para obstruir sus movimientos fueron dispersados por los golems. Personas, bestias; los muñecos sin vida que revestían diferentes formas no permitían el acercamiento de nada.
“Qué héroe tan poco elegante tenemos aquí. Parece un niño enfadado en una fiesta”
Soltando los brazos cruzados, el gigante de piel morada clara cierra el puño. Tener unos tres metros de altura lo hacía pequeño en la raza de los Gigantes, pero la musculatura que se agolpaba en ese cuerpo y el aura sobrecogedora que se extendía demostraban que es un demonio que hace honor a su título de general.
Las palabras que dirigió al héroe también tenían peso. Eran tranquilas y a la vez pesadas. Y la presencia de los 4 puños que hizo también fue algo importante.
“¡No sabemos nada de lo poco elegante! ¿No eres tú el que tiene la cabeza rota, yendo con las manos desnudas al combate?” (Tomoki)
Tomoki lanza una luz como sustituto de un saludo.
“¡Mun!”
El general de los demonios, con una mano, intercepta la luz oscura que se escinde.
Al chocar, la luz desaparece. Pero el brazo que se utilizó para interceptar este ataque se quemó en negro y había perdido su forma base.
“… Como era de esperar, un solo golpe no será suficiente eh. Bueno, tu oponente es otro. Con esto estoy diciendo sayonara. No hay forma de que pierda si peleo, ¡pero tengo que cumplir mis promesas, ya sabes!” (Tomoki)
El excedente de Tomoki y los demás cambian de dirección, evitando el frente donde está el general demonio y comenzando su ataque a las tropas del lado izquierdo.
“¡No te dejaré hacer eso! ¡Mu!”
El general demonio intentó perseguir a Tomoki, pero al sentir algo, mira hacia el camino por donde había aparecido Tomoki.
Un algo vestido de luz carmesí y con forma de luna creciente se acercaba. Como si corriera detrás de Tomoki que está montado en un dragón.
“Hoh~, este parece un guerrero. ¿Tuviste la oportunidad de aprender a hablar?” (Cuatro brazos)
Susurrando divertido, el general demonio dispersa el ataque rojo con una mano. La figura de Hibiki blandiendo una espada vestida de rojo está ahora a la vista. En ese choque de poderes no hubo ni una sola herida en su brazo. Esto era una prueba de la diferencia de potencia de fuego entre Tomoki y Hibiki.
“¿Te he hecho esperar? Si el que vino antes que yo hizo algo descortés me disculpo pero…” (Hibiki)
Tal vez ya no estaba tomando en cuenta al héroe masculino de hace unos momentos, con una sonrisa feroz en su rostro, la figura de él esperando la llegada de Hibiki era realmente imponente.
“No, era un héroe realmente hyumano. Porque aunque las palabras llegaran, era imposible establecer una conversación” (Cuatro brazos)
Severo sarcasmo.
“Me molesta que pienses que esa es la reacción obvia que tendría un hyuman” (Hibiki)
“Entonces demuéstralo. Sin embargo, no será con palabras, sino con tus habilidades” (Cuatro brazos)
Contra el gigante que pone los puños por delante, Hibiki le mira a la cara y prepara su espada bastarda.
“Por supuesto, lo haré. Soy la héroe del Reino de Limia, Otonashi Hibiki” (Hibiki)
“Vaya, vaya, qué educado. Soy el tercer general del ejército demoníaco, el Semigigante Io” (Io)
El general demonio que tuvo los ojos muy abiertos por un segundo debido a la autopresentación de Hibiki, la devuelve con su propia presentación.
“Puede que nos superen en número, pero aun así, ganaremos. Incluso si nos vemos así, fuimos capaces de alejar la calamidad después de todo” (Hibiki)
“La araña eh. He oído el informe. Parece que son muy capaces. Además, lo de estar en inferioridad numérica es un malentendido. Prometo que seré el único que luche contra el héroe y su grupo” (Io)
¡”?! Espera, ¿tiene un brazo quemado y todavía dice eso?” (Hibiki)
Mirando el brazo carbonizado que probablemente no pueda ser usado en absoluto, la chica detiene sus movimientos por la sorpresa.
“N, ah, esto ni siquiera es digno de llamarse minusvalía. Fuhm” (Io)
Pequeñas grietas aparecen en el brazo carbonizado. Con un solo movimiento de la misma, esa piel carbonizada se quitó y apareció un brazo como si nada hubiera pasado.
“… ¿Es la llamada regeneración de alta velocidad?” (Hibiki)
“Así es. Bueno, no está en el absurdo nivel de la araña negra, así que puede que no esté a la altura de las expectativas.” (Io)
“Me has hecho recordar un recuerdo inoportuno. Además, ¡parece que sabes mucho y has preparado una trampa así!” (Hibiki)
“Esta vez he tenido un montón de cosas empujadas sobre mí así que. No estoy luchando sólo por mí. Esa trampa fue idea de la mujer zorro que se hace llamar táctica” (Io)
El desprecio de Hibiki es respondido por Io con palabras de disculpa. La habilidad de regeneración no es algo que obtuvo para molestar sino que nació con ella y el plan fue planeado por alguien más.
A él mismo le gusta luchar limpiamente enfrentando sus habilidades. Al fin y al cabo, es un guerrero de pura cepa.
“¿Me estás diciendo que el responsable es otro? ¿No es eso sucio?” (Hibiki)
“Fufufu, ¿Me estás provocando? No es que esté tratando de escapar de la responsabilidad. Además, estoy planeando convertirme en un héroe al derrotar a miles de hyumanos, ¿Sabes? No hay necesidad de dejar que los logros se me escapen de las manos. Si obtengo subordinados subiendo de rango, terminaré siendo incapaz de luchar de la manera que deseo. Eso es lo único que quería decir” (Io)
Dejando escapar las palabras de Hibiki, Io muestra el anillo sencillo pero de buena calidad que lleva en su grueso dedo.
“¿Qué? ¿Un anillo de compromiso?” (Hibiki)
“No, no, qué broma más graciosa. Estoy soltera. Esta es una de las cosas que dije antes, algo que me empujaron. Me dijeron que lo usara para atacar al héroe. En este momento los dos deben estar en el rango, un buen momento para usarlo. *Ghjkop ~ kkjjgf*” (Io)
Con las palabras desconocidas que usó como señal, el anillo se desmorona como si fuera de arcilla.
“… ¿Qué?” (Hibiki)
La fuerza en su cuerpo se siente como si se estuviera filtrando. El fortalecimiento que obtuvo con la bendición, sintió como si saliera de su cuerpo. No sólo eso, el lobo que estaba a su lado protegiéndola, se oscureció y desapareció.
“Hoh”. Realmente ha surtido efecto. Con esto, por fin puedo ver nuestro mundo en marcha” (Io)
El gigante, al ver que el lobo se desvanece, abrió mucho los ojos y hace una sonrisa de satisfacción.
“¿Qué… has hecho?” (Hibiki)
“Intenté… borrar la bendición de ustedes. Aunque parece que sólo funciona durante un tiempo limitado. Estaba conteniendo la respiración, pero parece que ha funcionado. Qué resultado tan espléndido” (Io)
“¡¿Has hecho desaparecer el poder del Dios con ese único anillo?!” (Hibiki)
“Tiene un coste disparatado y es desechable. Un producto incompleto que apenas puede ser útil en situaciones limitadas. De todos modos, teniendo algo así como una maldición de 4 veces, ¿Realmente crees que nos quedaríamos mordiéndonos los dedos? En primer lugar, ¿Crees que nos hemos quedado a medias en esta lucha? Siento decir esto pero, ya hemos hecho contramedidas para su maldición. Planear pensando que estás luchando contra el mismo oponente que hace 10 años, ni siquiera un tonto haría eso, ¿Sabes?” (Io)
“Uh” (Hibiki)
Es cierto. Si me afectara una maldición de 4 veces, trataría de hacer algo al respecto primero, es lo que Hibiki pensó también.
“Ahora, Hibiki y los demás. Comencemos. Por favor, muéstrame el poder de un héroe. ¡Muéstrenme que es un poder que puede alcanzar al Señor de los Demonios!” (Io)
Una voz realmente eufórica resuena en el campo de batalla.
Hibiki y Naval avanzan como respuesta. En una situación angustiosa en la que normalmente uno se retiraría, la lucha del general demonio y el héroe comenzó.
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“Hibiki, ¿Qué está haciendo esa chica?”
La voz impaciente de Tomoki se escucha desde la cima del dragón que vuela en el campo de batalla.
Su cuerpo se había vuelto repentinamente pesado. Sentía que su cuerpo se había vuelto aún más pesado que antes, como si se hubiera puesto un limitador. Pero lo importante no es eso. El problema es que la lanza y las botas, así como la armadura, no mostraban ninguna reacción.
El collar que se está usando como almacén se puede activar. Pero todo lo demás no mostraba prácticamente ninguna reacción. La armadura de la que apenas podía sentir el peso y que había mostrado numerosos efectos defensivos, se había convertido ahora en una mera armadura pesada. Cuando esto ocurre, incluso el traje de goma que llevaba como base se sentía incómodo.
Prácticamente todas las armas que invocó desde su anillo no mostraron ninguna reacción. Lo único que mostraba una respuesta era una fina espada.
Para él, que no es apto para el combate cuerpo a cuerpo, este equipo no tenía sentido. No era un arma que uno pudiera usar cuando está en un estado de montaje de todos modos.
El responsable de esta irregularidad es probablemente ese general demonio. En ese caso, significa que esto fue causado por la ineptitud de Hibiki.
(¡¿El poder de la diosa está sellado?! ¡¿Está bien que el primer jefe tenga este tipo de poder?! O más bien, si no puedo usar el poder que la Diosa me dio, entonces… ¡¿Los ojos del demonio no están en problemas también?! ¡Tengo que escapar de este lugar lo antes posible!) (Tomoki)
Pero Tomoki que había pensado hasta ese momento, se da cuenta de una realidad importante. Que si la protección divina de la Diosa se ha perdido, la condición más importante se ha perdido también. Tomoki mira al cielo.
(No me digas, ¡Podría ser, podría ser, podría ser! ¡¿El estado inmortal también se ha cancelado?!) (Tomoki)
La sangre sube a la cabeza de Tomoki.
Esto no es una broma. Si realmente es así, el sentido de elegir la noche perdería su sentido. Es porque incluso si las cosas empeoran, todavía tiene esta inmortalidad en la que confiar. Por eso aceptó participar en esta operación a gran escala.
No estaba seguro, pero con el razonamiento era suficiente. El hecho de que podría morir con sólo una bala perdida en su estado actual.
El miedo a la muerte empieza a apoderarse de él.
(¡No es bueno, si me quedo en este tipo de lugar moriré! Pero si me agito y vuelvo… En todo caso, los puntos de afecto que había acumulado con esfuerzo, si me retiro ahora… Bueno, no importa. Si me liberan de este estado, podré recuperarlos en cualquier momento. Incluso Nagi, si muriera, sólo tengo que capturar uno nuevo. Tengo que retirarme aunque sea a la fuerza) (Tomoki)
Siendo desconocido para la muerte, había obtenido equipo de la clase más alta y se había comportado con fuerza en el campo de batalla. Aunque su nivel es alto, no había experimentado las situaciones de muerte y vida que corresponden a esa experiencia. Este tipo de reacción no era una sorpresa.
Hasta ahora, cuando pensaba que existía la posibilidad de que le dispararan, sólo salía por la noche cuando había luna.
“Tomoki, ¿Qué pasa?” (Ginebia)
“¡Ginebia, la situación ha cambiado! Vamos a volver tan pronto como podamos a donde está Lily!” (Tomoki)
Ginebia, que estaba preocupada por Tomoki, recibió un grito.
“¿Pero qué pasa con Hibiki y los demás? ¿Y todos los del Imperio? Creo que si es sólo una cobertura, todavía podemos hacerlo con seguridad” (Yukinatsu)
“¡Cállate Yukinatsu! Estoy preocupado por la seguridad de Lily, tengo un mal presentimiento. De todos modos, ¡date prisa! Nagi, ¡Date prisa!” (Tomoki)
Una mentira. Lo de Lily y lo de tener un mal presentimiento. Ahora mismo sólo rezaba por su propia seguridad.
“¿Onii-chan?” (Mora)
Perdiendo las palabras por el repentino cambio, Mora simplemente murmura. Esta es la primera vez que ella ha visto tal lado de él.
Al ver a Tomoki, que ha empezado a hablar de volver como si hubiera perdido la cabeza, los tres compañeros empezaron a tener dudas. Pero esos tres ya habían aceptado su orden de retirarse una vez, aunque se haya vuelto impaciente y contundente, no hay manera de que puedan negarse en este momento.
“¡Rápido! Vamos a dejar este lugar!” (Tomoki)
“Entendido. ¡Nagi, vamos con todo! Hazlo lo mejor que puedas!” (Mora)
“No hay que ayudar. No parece que podamos luchar hasta que Tomoki se calme de todos modos. Ginebia, cuento contigo. ¡Aaah geez! Yo también me prepararé para ir en rojo haciendo una liberación gigante de golems y réplicas!” (Yukinatsu)
“¡Entendido!” (Ginebia)
Los tres, que se encontraban bajo los ojos del demonio cerca del nivel de ser prisioneros, fueron ahora liberados de esa maldición temporalmente pero todos los efectos acumulados hasta ahora ataron sus cuerpos. Tal y como lo planeó Tomoki, todo ese amor acumulado los ata ahora.
Mientras la feroz batalla de Hibiki e Io continúa, el héroe de Gritonia sobrepasa las líneas enemigas y se dirige al campamento del Imperio, a la tienda donde la princesa Lily está esperando.
Si al menos consiguen pasar las líneas enemigas, no habrá más obstáculos. Parece que aunque el ejército de demonios se desplegó en la retaguardia del ejército unido, aún no han llegado a controlarlo.
El tiempo necesario para llegar al campamento del que salieron no fue tan largo.
“¡Tomoki-sama, así que estabas bien! Ah, ¡Qué alivio!”
A pesar de estar herido, Nagi finalmente pudo llegar a su destino y debido al cansancio ni siquiera plegó sus alas y simplemente cayó al suelo. Al ver al héroe que bajó de él, Lily corrió rápidamente a su lado y mientras le daba un abrazo, le dedicó palabras de felicidad por su regreso.
Tomoki, liberado de las garras de la muerte, pierde sus fuerzas aliviado. El sudor salió de golpe y su cuerpo no podía dejar de temblar.
“Princesa, haber dejado que ocurriera tal error, ¡por favor, perdóname!” (Ginebia)
Ginebia cae de rodillas y se disculpa ante la princesa que continuó su abrazo. Prometiendo la victoria en su salida y luego regresando por sí mismos, lo desagradable que es esto.
“Ginebia, organizar el informe de la situación. Ven a mi tienda. Que alguien venga a ocuparse del dragón de Mora. Está increíblemente agotado. Mora, gracias por salvar a todos” (Lily)
“¡Tte, espera! ¡¿No hay nada para mí?!” (Yukinatsu)
Yukinatsu. Al ver a la princesa dando instrucciones rápidas pero sin ser mencionada en ninguna parte, Yukinatsu hizo un tsukkomi incluso cuando la otra parte es una princesa. Era un acto que demostraba su estrecha relación.
“Yukinatsu, viendo tu estado, parece que has hecho un gran gasto. Pero que elijas a tus camaradas por encima del dinero me hace muy feliz. Si me das la lista completa de lo que has usado, asumiré toda la responsabilidad de ello, así que estate tranquilo. Ve y tómate un merecido descanso” (Lily)
“Los gastos en estas situaciones peligrosas no importan. Más importante, en esta situación lo que necesitamos ahora mismo es alguien que pueda ver todo el campo de batalla y dar instrucciones claras. ¿Puedes hacerlo?” (Yukinatsu)
Yukinatsu parece serio y Ginebia levanta la cabeza y acepta.
“Lo entiendo. Por eso he venido. Aunque al final acabamos volviendo inmediatamente. Tomoki-sama volvamos. Por favor, cuéntame también lo que pasó” (Lily)
Lily mira el campo de batalla. Y pronto gira su cuerpo y regresa al campamento.
Mientras escucha el informe de Ginebia, Lily tranquiliza a Tomoki, lo anima, lo reconforta, lo cura. Ella también confirma la situación de la batalla de su boca.
(Se convirtió por completo en una lucha perdida eh. En ese caso, no importa qué tipo de daños reciba el imperio, lo importante es retirarse. Por suerte, el héroe del Reino parece seguir luchando, así que hagamos que el ejército del Reino funcione como nuestro escudo. La fuerza del Reino también se verá mermada, así que dos pájaros de un tiro. Pensando en ello, si el héroe de Limia muere aquí, el futuro sería mucho más fácil para mí, pero… esto sería demasiado codicioso. Nuestro héroe de alguna manera se las arregló para regresar sin romperse y hemos entendido un poco de los movimientos y tácticas de la raza demoníaca. Como cosecha, esto es suficiente. Originalmente estaba bien si no ganábamos de todos modos, así que dejémoslo así. Además, el imperio en este momento debe ser… Fufufufu) (Lily)
“Tomoki-sama, has pasado por mucho. Por mi propia falta de habilidad en la recopilación de información te he hecho pasar por un momento tan duro. Lo siento de verdad”. (Lily)
“Lirio. Está bien, incluso Limia no sabía nada. Más importante aún, ¿debería haber actuado junto con el héroe Limia? Con nosotros dos, las posibilidades de ganar podrían haber sido mayores” (Tomoki)
“¡No! El estúpido es esa burla de héroe, Hibiki. La existencia llamada héroe da esperanza al vivir. Morir por aliviar su propia satisfacción es sólo abandonar su deber. Tomoki-sama es especial, si se salvara por el sacrificio de miles de soldados, seguiría siendo barato. Fue la decisión correcta. Por favor, ten más confianza en ti mismo” (Lily)
“… Ya veo. Tienes razón. Si muero no saldrá nada de esto, ¿verdad? Gracias Lily, ¡Tendré más confianza y seré aún más fuerte!” (Tomoki)
“Sí, hazte tan fuerte como quieras. Lily siempre estará a tu lado Tomoki-sama” (Lily)
(Si la protección divina de la Diosa es suprimida, en el estado actual, casi no vale la pena usar “esto”. Viendo la compatibilidad de las herramientas de hechicería que tiene, creo que es mejor aumentar la cantidad de artículos que tienen tanto uso. Tener armas apiladas dentro del almacén de anillos que ni siquiera usa, sólo estorbaría de todos modos. Qué problemático. Esa visión patética que mostró esta vez está fuera de lugar. La limpieza será un gran dolor. Siendo bendecido con tal ambiente y teniendo ese equipo así como nivel, él todavía tiembla vergonzosamente. El héroe que la Diosa nos ha dado está seriamente roto) (Lily)
Ella abraza profundamente a Tomoki una vez más. Mientras tiene un ligero brillo frío reflejado en sus ojos que los otros tres compañeros no tienen.
(Los soldados del imperio que vieron personalmente la patética figura de nuestro héroe ya están muertos en su mayoría. En el caso de que vuelvan, les haremos materiales de experimentación. Haciendo eso, el resultado será el mismo. Obtendremos el silencio. Las armas tienden a explotar mucho y para completarlas necesitamos mucha gente después de todo. No importa cuántos tengamos, no será un problema. Para Stella, la dejaremos dormir durante tres meses… No, alrededor de medio año. Incluso si esto era parte de su plan, sigue siendo cierto que fuimos capaces de asaltar los exteriores de la puerta. Si nuestro lado logra hablar sin problemas, deberíamos ser capaces de ganar esa cantidad de tiempo) (Lily)
Lily ordena sus pensamientos.
El plan de recuperación del Fuerte Stella fracasó. Utilizando al héroe de Limia que se decidió a contener al enemigo, las tropas del Imperio se retiran del frente. El ejército del Reino espera a que su héroe escape y trabaje como retaguardia mientras se retira. Escapando a duras penas de la sucia trampa de la raza demoníaca, el héroe de Gritonia se disculpa ante los ciudadanos y promete volver.
La princesa concluye y controla la verdad de la información que su propio ejército debería conocer. Poniéndose en contacto con los oficiales del Reino, deciden el proceso de su retirada.
Con la información desordenada y sin poder contactar en absoluto con el frente, la información de que el héroe de Gritonia era el único que había regresado fue utilizada como arma por la princesa y, manipulando en las sombras, los resultados salieron a la luz instantáneamente.
Las acciones de Hibiki fueron completamente contraproducentes. La información que el héroe sacó directamente no eran mentiras, es lo que la princesa del Imperio les hizo pensar y los oficiales de Limia que recibieron esta información, mientras lloraban y alababan la decisión de Hibiki, aceptaron alegremente la tarea de ser la retaguardia. No solo eso, una unidad de jóvenes se levantó y pidió permiso para rescatarla a lo que el oficial superior dio su autorización. La princesa Lily, tal vez porque no consideraba esto como algo que traería problemas a sus planes o porque si los negaba traería dudas, sólo lloró y alabó su valentía antes de partir.
Así, cuando el cielo se tornaba gris, comenzó la retirada del ejército unido.