Tsuki Ga Michibiku Isekai Douchuu - Capítulo 277

Capítulo 277: Hilo, Loto Carmesí y Arma de Asora

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Un hombre grande que supera los 2 metros de altura.

Al estar cubierto por una armadura de músculos reventados, posee un poder defensivo y una resistencia que concuerdan con su aspecto físico. Pero incluso cuando su apariencia dice claramente que es del tipo de primera línea, también se especializa en el apoyo preciso y hábil.

Así que es injusto.

Probablemente estén utilizando algún tipo de método para amortiguar la magia curativa en gran medida, en esta situación actual donde la recuperación de los heridos es bastante lenta, el número de enemigos no ha disminuido en absoluto.

Tres demi-humanos.

Sólo tres.

Incluso en esta situación abrumadoramente ventajosa que es la lucha en su territorio.

No se han vuelto altaneros ni nada, están luchando al máximo.

Mientras se irrita por esto, la capitana de Picnic Rose Garden, Vivi, sigue moviéndose silenciosamente escondida.

(Ageha y yo derrotaremos a ese hombre Arke. Bueno, eso digo yo, pero ese Arke llamado Hokuto ya es diferente a los Arkes que conocemos. Así que esto es lo que pasa cuando esas cosas se vuelven inteligentes eh. Qué dolor). (Vivi)

Ya era evidente que era un oponente con el que normalmente se evitaría la batalla.

Una organización que tiene suficiente potencial de guerra para atacar su base, e incluso con una ventaja numérica abrumadora, todavía no se sabe si pueden ganar.

Y esa organización es una empresa. Esta es en serio una broma divertida.

Pero a Vivi no se le pasó por la cabeza la palabra armisticio.

Aunque su orgulloso grupo de mercenarios esté teniendo una lucha inesperada y dura, aún quedan cartas.

Además, la actual líder de Picnic Rose Garden, Vivi Poze, es una persona profundamente emocional.

Sin embargo, es tanto un punto fuerte como un punto débil. En cualquier caso, a cualquiera que ella considere un camarada suyo, lo atiende con amabilidad.

Incluso si se enfrentan a un enemigo que posee un gran poder que los derrotaría en muchos escenarios, son los tipos que hieren profundamente a Pione.

Y son los tipos que mataron a todos los amigos por los que Pione lloró y estuvo dispuesta a dar su vida para salvarlos.

A los ojos de Vivi, Pione es familia.

No llega a ver a sus amigos como familia, pero aun así, son conocidos que se refugiaron en su base durante un tiempo.

(Sé muy bien que la venganza no trae nada bueno. Pero también sé de sobra que hay gente que no puede seguir adelante sin tener ningún tipo de conclusión, no todo el mundo puede olvidar sin más. Si es por el bien de ver a Pione sonreír alegremente una vez más, esta líder suya, Vivi-san, hará todo lo posible). (Vivi)

Indagando en la misteriosa alineación de objetos que el enano estaba sacando, y, además, decidiendo la coordinación entre uno de sus compañeros Ageha por contacto visual, Vivi borra su propia figura de la vista, y finalmente alcanza la espalda de Hokuto.

El entrenamiento de la habilidad de sigilo de Rokuya estaba mostrando sus colores completos aquí.

No es tan precisa como la propia persona, pero su utilidad es increíblemente alta.

Y para demostrarlo, Vivi ha estado observando cautelosamente a Hokuto, Shii y Beren, y está segura de que no se han dado cuenta de su presencia.

En otras palabras, es el momento de atacar.

También ha recibido el contacto de los Marikosans que ya han terminado su primer trabajo y se iban a reunir con ellos en unos minutos.

Planeaban ir a ayudar a esas chicas ya que estaban en el lado más problemático del campo de batalla, y sin embargo, terminó con esas chicas viniendo a ayudarlas lo que hizo que Vivi se sintiera ligeramente mortificada, pero es cierto que sus enemigos son fuertes.

Debería alegrarse por el refuerzo.

(¡Aquí está!) (Vivi)

Desde la dirección que se le notificó de antemano, detecta una andanada de lanzas ligeras, y decide que se moverá justo después de que ese ataque impacte.

En este momento se encuentra en el lugar donde caerá ese bombardeo, pero, tal vez tenga confianza en esquivarlos a todos, no mostró ninguna señal de huir.

“¡Beren! ¡Hokuto-chi! ¡Un ataque con elemento luz y un poco de elemento tierra, entrando! ¡El poder está por encima de la media! Números… ¡Muchos!” (Shii)

(La Oni del Bosque, Shii, ya ha…) (Vivi)

“Yo también me he dado cuenta. ¡No hace falta que nos digas la dirección, Shii!” (Hokuto)

“¡Entendido! Quiero decir, ¡Encargado!” (Shii)

Una notificación vino de Shii, que estaba luchando en el cielo con el hilo de Hokuto y su propio hechizo volador.

Percibió el ataque casi al mismo tiempo que era liberado, y se lo hizo saber a los dos de abajo.

“Beren, ¿Puedo dejártelo a ti?” (Hokuto)

“¡Por supuesto! Ya he comprendido un poco la fuerza de este lugar, ¡ya ves! Puede ser bloqueado en su mayor parte por la Lámina Aegis, ¡Pero bien podría darles una ráfaga!” (Beren)

En este campo de batalla donde la tensión ha aumentado bastante, el Eldwa Beren responde a las palabras del Arke.

El ataque mágico de los marikosans es un ataque poderoso que no caería tras las trampas mortales de los niveles inferiores de la mazmorra.

Otra cosa sería si lo conocieran de antemano y tuvieran preparada una contramedida para ello, pero no es un ataque al que se pueda hacer frente nada más verlo.

Al menos, no en el sentido común de Picnic Rose Garden.

“¡Aquí vamos! ¡Trae a Shii aquí por si acaso! En primer lugar, ¡[Catapulta]!” (Beren)

Con las palabras de Beren, aparecieron aparatos que no eran tan grandes a ambos lados.

Las alarmas dentro de la cabeza de Vivi comienzan a sonar cuando ve esas cosas que no ha visto antes dentro de los misteriosos objetos que él sacó.

(Se parecen a las balistas, pero es ligeramente diferente. ¿Qué está planeando hacer?) (Vivi)

Su inquietud crece cada vez más.

Pero no puede cambiar su plan demasiado drásticamente en este momento.

“¡Preparen, lanzas explosivas!” (Beren)

Lo que fue convocado ahora son lanzas.

En el centro del mango de la lanza, hay un extraño mecanismo. También es un arma que Vivi ha visto por primera vez.

4 lanzas como las que se usan en las balistas.

“Hmph…el poder de ataque y el alcance…Umu, en ese caso, el ángulo sería…el siguiente, solo hay que ajustarlo, y…” (Beren)

Beren, que se ha equipado unas gafas de aspecto duro, estaba murmurando algo, y entonces, como si cumpliera sus palabras, los 4 aparatos comienzan a moverse.

“¡Dispara!”

(?!)

Las 4 lanzas apuntaron hacia la masa de luz en el cielo -no, el muro de luz- y fueron disparadas.

Las lanzas y la luz hicieron contacto, y un intenso destello cubrió toda una zona.

Y en ese momento, una débil vibración parecida a un terremoto reverberó en el espacio.

“¡Así que no los eliminó a todos, eh! Bueno, esto que sigue es algo que fue creado al manipular un producto que los hyumans fabricaron. ¡La Lámina Aegis!” (Beren)

(Tch, ¡No está cayendo ni uno solo! ¡No puedo confirmarlo con la vista, pero estaba bloqueado! En ese caso…!) (Vivi)

Un destello y vibraciones, aun así, Vivi, que había calculado con precisión la cuenta atrás para el impacto, comprende inmediatamente que el fuego de apoyo no había mostrado ninguna efectividad.

Pero puede crear un espacio en blanco donde el ataque y la defensa desaparecen temporalmente.

En el tiempo de alivio que fueron capaces de bloquear el peligro de varios cientos de hechizos, Vivi se moverá.

Ataques por sorpresa, asesinatos, movimientos finales; todo ello forma parte de su repertorio.

No importa cuán acorralados estén, ella es una persona que muestra una habilidad increíblemente alta.

“¡Historia del Imperio Asura, [99 espinas]!” (Ageha)

¡¡”?!! Esto es…!” (Hokuto)

Hokuto, por reflejo, adopta una postura defensiva contra la sombra que le rodeaba de lado a frente y activó una habilidad.

Una de sus manos fue arrastrada por una cuerda.

Es Ageha. La compañera de Vivi y una mercenaria de pura cepa.

Ageha se había entrenado en las técnicas de mano vacía, y el Asura Primero que utilizaba era el ataque que poseía el mayor poder de entre los ataques que Hokuto recibía en esta batalla, pero el ataque combinado de ahora estaba compuesto por ataques comparables a él.

Con sólo su mano derecha libre, fue incapaz de lidiar con el combo de ataques que estaba siendo conducido hacia él por esta sombra desconocida.

Pero, él no es un hyuman.

Aparecen dos brazos más y comienza a bloquear los golpes y patadas que eran como una tormenta.

Hokuto sintió que la acumulación de daños superaba la orgullosa capacidad de regeneración de los Arkes y se estremeció.

Recibiendo los 99 ataques, y habiendo sufrido fuertes daños en su cuerpo, lo que ocupaba su corazón no era miedo, sino simple admiración.

Sentimientos de admiración por el hecho de que alguien que no es de Asora y que ha estado viviendo en la sociedad hyumana pueda poseer una técnica con tanto poder.

Incluso si las condiciones son desventajosas para él y su grupo, esta fue una apertura que se creó a partir de él teniendo la confianza de abrumar a los humanos.

“Los preparativos están hechos. Araña bribona, prepárate… [Empuje blanco]!” (Ageha)

Todo el cuerpo de Ageha rebosaba del aura de un movimiento final.

La parte suelta de su ropa y su pelo se levantaban lentamente.

Viéndola adoptar una postura de medio cuerpo, Hokuto pudo notar que el puño que estaba en la parte no visible de su cuerpo estaba reuniendo un poder que no había mostrado antes.

“¡Todavía continúas, eh! Espléndido, mujer de karate!” (Hokuto)

Hokuto mueve ligeramente la mano que controlaba el hilo, y saca los otros 5 brazos restantes que tiene y comienza a crear aún más hilos.

“¡[Hilo Adamantino]!” (Hokuto)

“Arte falso, manos negras que se arrastran, [Todo peligro]”.

“Cu-cuando hiciste…” (Ageha)

El puño de Ageha se clavó en el escudo de hilos que se hizo en un instante.

En ese instante…

Hokuto sintió la presencia de alguien que aparecía repentinamente por detrás, y que tenía la misma cantidad de poder de la que sintió en el frente, y cuando giró su mirada hacia esa dirección, se sorprendió.

Allí había una mujer que no había visto antes.

El brazo que sostenía su daga estaba cubierto con algo negro que llegaba hasta el codo.

Eso es peligroso.

Incluso Hokuto pensaba así de esa habilidad.

Esta desconocida, Vivi, ya había entrado en acción impulsándose con toda la fuerza de su cuerpo para tomar el cuello de su presa.

Aunque ahora tenga un mayor número de brazos, sabe que no llegará a tiempo para protegerse.

Ahora que ha llegado a esto, no le queda más remedio que soportarlo.

Hokuto, que se había propuesto recibir el ataque por la espalda, se sorprendió por dos cosas que sus ojos vieron.

“¡¿Ha atravesado la adamantina?!” (Hokuto)

“¡El Puño Blanco no llega!” (Ageha)

La técnica especial de Hokuto, añadir una propiedades especiales al hilo que producen los Arkes y fortalecerlo, yarning.

Es una técnica que aprendió cuando decidió entrenar fielmente en sus técnicas de hilo primero, y las propiedades especiales que se pueden dar son realmente variadas.

Dentro de esas variedades, la propiedad adamantina es corta en tiempo efectivo, pero también ha demostrado que es capaz de repeler la mayoría de los ataques.

No esperaba que un solo golpe fuera capaz de atravesarla.

El movimiento de remate de Ageha en el que más confiaba sólo fue capaz de atravesar una película del hilo y, sólo con eso, perdió todo su poder y fue incapaz de alcanzar a Hokuto.

Y lo otro sorprendente fue…

“¡Heave-ho~~!”

La aparición de un intruso que voló justo entre Hokuto y Vivi con una velocidad increíble.

Ella blandió su dura vara metálica con toda su fuerza contra la negra embestida.

Era difícil de creer, pero la que salió rebotada fue la vara de metal.

“¡Qué increíble dureza y velocidad! ¡No se puede evitar entonces! Ahora que se ha llegado a esto, también voy a mostrar mi baza…”

“…¡Desde qué increíble lugar te estás entrometiendo! Quédate en silencio en las líneas de fondo como la Elfa que eres!” (Vivi)

El ímpetu del ataque de Vivi murió, pero incluso con eso, vuelve a acumular fuerza dirigida no a la persona que se entrometió, sino a Hokuto una vez más.

“Si es posible, quería terminar este combate sin usarlo, pero como compañera de Hokuto, ¡no puedo dar un paso atrás aquí!”

La identidad de la intrusa es la Oni del Bosque, Shii.

Con la misma técnica de aprendizaje, el hilo que unía a Hokuto y a Shii recibió una fuerte propiedad de goma, añadiendo eso a su propio hechizo de aceleración, consiguió interferir al instante.

Esta era una velocidad que ni siquiera Hokuto esperaba, y también es la razón de su sorpresa.

Shii digirió inmediatamente que su propio ataque de orgullo fue repelido, y sacó una botella larga y estrecha con aspecto de tubo de ensayo con líquido rojo del soporte que tenía en la cintura.

Un sonido agudo se hizo cuando rompió el sello de la misma, y se lo bebió todo.

“Parece que los hyumans desean esto como ingrediente para sus elixires, pero para nosotros es el ingrediente para nuestra carta de triunfo. ¡Fármaco de la evolución, [Loto Carmesí]!” (Shii)

El poder mágico rojo brota a borbotones.

Un torrente de poder mágico furioso diferente a su estado habitual envuelve el cuerpo de Shii.

“¡Con esto, te haré caer!” (Vivi)

“¡No lo harás! No te lo permitiré!” (Shii)

La vara metálica revestida de poder mágico rojo y la estocada negra vuelven a cruzarse.

Ambos poderes mágicos chocan y una poderosa onda expansiva asalta los alrededores.

“Qué poder tan loco…” (Vivi)

“Ouch ouch… realmente duele~. Se me han entumecido las manos. Pero esta es mi victoria. Bueno, entonces… ¡Vuela, [Tormenta Homerun]!” (Shii)

Shii sujeta la vara de metal con ambas manos y lanza un amplio golpe a Vivi, que tenía la postura muy desmoronada.

La líder del grupo de mercenarios fue aplastada hasta la distancia.

Y mientras eso ocurría, Shii había lanzado la barra de metal y ésta perseguía directamente a Vivi.

“¡Vivi!” (Ageha)

“Esa Shii, realmente lo hizo. Bueno, entonces vamos a encargarnos de esta también”. (Hokuto)

“¡¿Esto es…?! ¡¿Una cuerda?! (Ageha)

“Se llama hilo, una técnica mía. Agrego una variedad de propiedades a los hilos. Mujer de valor, fuiste fuerte”. (Hokuto)

“…Tch. Si el Puño Blanco se hubiera conectado, la historia podría haber sido diferente, pero… esta pelea, es nuestra derrota eh”. (Ageha)

Hokuto y Ageha intercambian sonrisas sin miedo.

Unos segundos después, el hilo que estaba enrollado alrededor del puño derecho que Ageha utilizó para su ataque comenzó a brillar… y explotó.

Ageha salió despedida hacia el lugar donde se encontraban sus compañeros, pero éstos no pudieron detener su fuerza y salieron despedidos junto con ella.

“¡Caramba! Realmente nos atacaron agresivamente allí. Quiero creer que esos eran sus ases en el grupo”. (Hokuto)

El ligero daño que aún quedaba en su cuerpo nubló su expresión.

“Sí. Aunque los cálculos decían que estaría bien aunque disparáramos las lanzas de ráfaga, estos tipos formaron un espacio que nos debilitó hasta el punto de hacernos disparar esas lanzas de ráfaga en un entorno subterráneo. Esto no es el trabajo de una gente normal. Si no fuera en este tipo de circunstancias, se llega a un nivel en el que me gustaría traer un poco de alcohol y escuchar el principio que hay detrás. En serio”. (Beren)

Beren se sorprendió de que fuera capaz de utilizar el arma que normalmente no es algo que se pueda utilizar despreocupadamente en el exterior, e incluso dentro de Asora, está clasificado en una posición relativamente alta.

Como Eldwa, posee más interés y habilidad en el área generalista que en la de especialización, por lo que estaba increíblemente interesado en la estructura de este laberinto.

“¿No hay una segunda andanada del ataque mágico justo ahora? ¿Qué están planeando hacer? ……Espera, ah, así que es así”. (Shii)

“Umu”.

“Como se esperaba de Waka-sama. Parece que el bombardeo fue hacia donde está Waka-sama”. (Beren)

Los dos asienten sucesivamente ante esto.

Porque sintieron que la delgada presencia de su señor ahora se había vuelto clara, y al mismo tiempo, el hechizo, que estaba revestido alrededor de su cuerpo y se había estado debilitando, estaba de nuevo firmemente revestido en él.

“Entonces, vamos a dar un empujón más”. (Beren)

“Sí”. (Hokuto)

“Incluso usé una ampolla del Loto Carmesí, así que hoy esta bien en ir a toda potencia. Como que está bien para acabar con todos ellos, ¿Verdad?” (Shii)

“Probablemente no hace falta decirlo pero, no mates a nadie, ¿Vale? Manténgalo a medio morir”. (Hokuto)

Shii, que tenía una luz ardiente en sus ojos, fue reiterada por Hokuto.

La lucha comenzaba a inclinarse fuertemente hacia la Compañía Kuzunoha