Tsuki Ga Michibiku Isekai Douchuu - Capítulo 231

Capítulo 231: Banquete de Remolinos

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Tarde en la noche.

El momento en que el sonido de la ciudad se detuvo y Tsige finalmente entró en el silencio.

Aun así, en esta ciudad que últimamente ha sido llamada como una ciudad sin noche, todavía hay lugares en los que la vivacidad continúa.

Por lo menos, esta habitación en la que sólo hay un hombre, está envuelta en el silencio.

Ese hombre es Patrick Rembrandt.

La gran empresa que todos reconocen en Tsige, el dueño de la Compañía Rembrandt.

“…”

Rembrandt seguía en silencio. Sus ojos recorrían la montaña de papeles que se apilaban en su escritorio.

Con la mano izquierda cogía los papeles, y con la derecha sostenía un bolígrafo que utilizaba para escribir a veces.

No hace falta decir que lo que está meditando actualmente en su cabeza es sobre la información del Reino de Aion y de Tsige.

Y esta es la información más reciente que ha recibido de los ojos y oídos que la Compañía Rembrandt ha colocado en las diversas áreas.

Por supuesto, siempre hay nueva información que llega a su lugar todos los días.

En este momento en que están tratando de aprovechar la revolución para obtener la independencia en Tsige, él es técnicamente la figura central, por lo que ha estado viviendo días donde el sueño es precioso.

“…Fumu. Todavía hay zonas difíciles, pero… el camino está hecho”. (Rembrandt)

Si este fuera el representante de la Compañía Kuzunoha, ya se habría ahogado en información hace mucho tiempo y habría escapado de la realidad con esta cantidad de trabajo.

Es una cantidad que aunque ocurra un milagro, organizarlo todo sería su límite.

Pero Rembrandt, que tiene su ingenio y experiencia, se asegura una pequeña cantidad de sueño cada día al captar adecuadamente la situación, y ya ha terminado su visión sobre la revolución del Reino de Aion y la independencia de Tsige.

“Estás siendo muy cauteloso”.

“…Bueno bueno, estoy asombrado. Pensar que eras alguien que no mostraba modales al entrar en una habitación, realmente no me lo esperaba.” (Rembrandt)

“Parece que se llama “sorpresa”. Lo aprendí de Raidou-sama”.

La repentina visitante respondió al sarcasmo de Rembrandt que señalaba su falta de sentido común.

Es cierto que una visita a altas horas de la noche sin ninguna cita previa es bastante grosera.

No es algo que se pueda perdonar diciendo simplemente que es una sorpresa.

“¿Cree que eso me hará consentir, Sairitz-sama? Venir a altas horas de la noche sin siquiera llamar a la puerta y, obviamente, sin cita previa. Eso no es más que un intruso”. (Rembrandt)

“Es cierto. Me disculpo por la descortesía. Lo siento de verdad. Pero, ¿No crees que deberíamos conocernos más, Patrick-sama?” (Sairitz)

La joven que se llama Sairitz, rechazó la aguda mirada y las palabras de Rembrandt, y le dirigió una mirada coqueta con un tono brillante.

Ella es de un país vecino de Aion, la Unión de Lorel, además, una persona con una posición influyente.

Pensando en su posición, en este momento está llevando a cabo una acción increíblemente peligrosa.

“Sin embargo, creo que ya entiendes lo que ambos necesitamos”. (Rembrandt)

Por otro lado, Rembrandt no rompe su actitud habitual.

Simplemente espera las siguientes palabras de Sairitz.

“Ara, aunque vas a hacer los mismos actos de astucia que cometiste en el pasado, estás siendo muy franco. Parece que la imagen que conocía de ti es ligeramente diferente ahora”. (Sairitz)

“¿Pretendes mostrarme el poder de la recopilación de información de la Unión Lorel y presionarme? Incluso si muestro la habilidad que tenía en el pasado, sería antinatural mantener la misma personalidad de entonces. Ya has investigado mucho, así que no bromees”. (Rembrandt)

“Sólo tienes ojos para tu mujer y tu hija eh. No puedo evitar ver esto como algo extraño a mis ojos. Coincidiendo con tu historia y personalidad, puede ser leve, pero se siente como si algo estuviera fuera de lugar. Estamos en una relación en la que nos convertiremos en camaradas. No haría algo así sólo por una pequeña sensación de incomodidad mía. Sin embargo, esa es una de las razones de mi invitación de ahora”. (Sairitz)

“¿Estás diciendo que si uniéramos nuestros cuerpos, podríamos confiar el uno en el otro? Bueno… admitiré que es un método válido cuando hay complicidad. Pero es una ilusión que sólo funciona entre un individuo y otro. No es algo que esperaría que hiciera la Emperatriz de Lorel en absoluto”. (Rembrandt)

“…”

“La escala de este asunto es demasiado grande para aplicarla. No sé por qué estás tan impaciente, pero si necesitas a alguien con quien consultar, dependiendo del caso, podría ayudarte.” (Rembrandt)

“Por Dios. Me he sentido increíblemente herida como mujer, pero ahora entiendo que usted ama de verdad a su esposa y a su familia. Aunque supiera que mi objetivo se lograría sin importar dónde rodaran los dados, sigue doliendo. Me abstendré de hacerlo en el futuro”. (Sairitz)

Sairitz pronuncia unas palabras que pueden tomarse como una rendición.

Es una actitud que se nota que el malestar que tenía de Rembrandt dentro de su cabeza se ha desvanecido.

“En serio. Si mi mujer tuviera la más mínima sospecha al respecto, mi vida cotidiana se convertiría en lo peor. Parece que ya se ha dado cuenta, pero me gustaría que dejara por completo este tipo de métodos que sólo traen riesgos para mí.” (Rembrandt)

Mientras suspiraba, Rembrandt reprendió el comportamiento de Saritz.

No se puede evitar.

A última hora de la noche, en la habitación en la que se supone que está trabajando y ya ha hecho salir a su mayordomo, hay una joven.

Es claramente una situación poco provechosa para el hombre.

“Este asunto es increíblemente importante para Lorel también después de todo. Incluso si es mi impresión personal, todavía quería confirmar el factor de incertidumbre que sentí. Estoy en una situación en la que ni siquiera puedo tocar el factor incierto más alto, que es la Compañía Kuzunoha, como ves.” (Sairitz)

“Kuzunoha y Raidou-dono son existencias bastante simples. No es que no entienda cómo se sienten, pero esos tipos devuelven sinceridad con sinceridad, y colmillo con colmillo. Se mueven con una lógica verdaderamente simple”. (Rembrandt)

“Hay veces que es temible no saber hasta dónde puede llegar esa simple lógica. Sobre todo para alguien como yo que se ocupa de la salud de mi nación”. (Sairitz)

“Probablemente puede llegar muy lejos. Es realmente una sensación agradable”. (Rembrandt)

“Como persona que sigue la religión de la Diosa, y sirve a los Espíritus, esto es algo que alguien como tú no puede entender”. (Sairitz)

Esta vez, Sairitz fue la que suspiró, y luego devolvió las palabras de crítica a Rembrandt.

“¡Jajajaja! No puedes entender eh. Y sin embargo, has ofrecido cooperación y estás tratando de que la Compañía Kuzunoha te deba algo. Dijiste antes que no importaba por donde rodara, pero con esa clase de principios en tus acciones, aún posees esa habilidad para tomar decisiones. Eres verdaderamente temible”. (Rembrandt)

“No tanto como tú. Incluso si tuvieras que descartar todo, el sentido común en el que creías, te concentraste en Raidou-dono. Eso es realmente el límite de la locura”. (Sairitz)

“No, no. Al contrario de lo que se esperaba, en realidad podríamos ser más parecidos de lo que crees. Por eso, dejando de lado la confianza, soy capaz de creer en ti. Valoro mucho esa terquedad tuya, y también puedo creer en tu criterio”. (Rembrandt)

“…También… creo en tu locura… y en la convicción que la sustenta. Esa convicción de no traicionar nunca a la Compañía Kuzunoha pase lo que pase. Por eso alguien como yo, que quiere evitar enfrentarse a ellos, es capaz de creer en ti”. (Sairitz)

“En serio. En otras palabras, no hay absolutamente ningún problema. Nosotros…” (Rembrandt)

” ‘Podemos formar una buena relación’, ¿Verdad?” (Sairitz)

“Sí”. (Rembrandt)

“Entendido. Siento haber interrumpido su noche de silencio. Me disculpo una vez más, Patrick-sama”. (Sairitz)

“No te preocupes. La próxima vez, te pido que hagas una cita adecuada de antemano, pero te daré la bienvenida. Ah, sí. Ya que tenemos la oportunidad, ¿Está bien que te pregunte otra cosa?” (Rembrandt)

“Por supuesto. Pregúntame”. (Sairitz)

“Tenía unas pequeñas dudas respecto a tus acciones y tu propuesta, ya ves. Me pregunto, ¿Qué clase de existencia es para ti una Sacerdotisa?” (Rembrandt)

“…Así que fuiste por eso”. (Sairitz)

“Que te muestren unilateralmente las habilidades de recolección de información de Lorel, se sintió injusto ya ves”. (Rembrandt)

Rembrandt obviamente había reunido información de Sairitz también.

Decir: “En cuanto a sus acciones y su propuesta”, era sólo una excusa.

Es porque había reunido información de Sairitz que sentía dudas sobre ella.

Rembrandt la había interrogado sobre una de ellas.

“…Para mí, ese personaje es…” (Sairitz)

“‘Ese personaje es…'” (Rembrandt)

“Una hermana, una hija y también un monarca. No… no es eso”. (Sairitz)

“…”

Las palabras que fueron atadas lentamente por Sairitz, Rembrandt las esperó en silencio.

“Lo más probable es que sea… alguien a quien… queremos proteger como sea”. (Sairitz)

Y entonces, las palabras revisadas de ella hicieron que los ojos de Rembrandt mostraran una luz de sorpresa.

“Hoh~. Para la Emperatriz, la Sacerdotisa es obviamente una existencia importante, pero cuando la sondeé, pensé que era una existencia que podía ser reemplazada.” (Rembrandt)

“¿Sustituida? Es cierto que es esencialmente así. Pero para mí, ella es la única Sacerdotisa. Fufu, esa es una respuesta que haría que la gente cuestionara mi posición como Emperatriz. Por favor, mantén esto en secreto”. (Sairitz)

“Por supuesto. Aun así, ya veo. Con esto, también he aclarado algunas de las dudas que tenía sobre ti. He podido hacer que este tiempo sea provechoso para mí también. Es algo de lo que hay que alegrarse”. (Rembrandt)

“Es estupendo escuchar eso. Bueno entonces, que tengas una buena noche”. (Sairitz)

“Que sueñes bien”. (Rembrandt)

Sairitz se fue de la misma manera que entró, sin hacer un solo ruido.

El silencio vuelve a la habitación una vez más.

“Fuh~. Estar en la frontera de la locura se aplica a los dos. Si la base de su juicio es la seguridad de la Sacerdotisa de la “era actual”, puedo entender esa fuerte predisposición suya. Esta fue una cosecha inesperada”. (Rembrandt)

Murmura en esta sala donde ahora sólo queda él.

“Si careces de consideración hacia la Sacerdotisa, tu cuello podría ser tomado mientras duermes; pero si le damos la vuelta, también significa que si no eres negligente en tu consideración hacia la Sacerdotisa, puedes creer en esa Emperatriz siempre que esté dentro de los límites aceptables. Es realmente de agradecer que se haya hecho mucho más fácil comprender sus verdaderos motivos”. (Rembrandt)

Cuando Rembrandt recibió una oferta de cooperación de la Emperatriz de Lorel, obviamente fue increíblemente cauto.

Por supuesto, todavía no ha liberado la cantidad necesaria de cautela hacia Sairitz.

Sin embargo, ahora que fue capaz de captar una parte del principio de acción de Sairitz, es capaz de entender sus movimientos.

Fue un gran paso adelante.

“Pero, ‘no importa donde ruede’ eh. Es cierto que en este asunto, definitivamente no va a haber ninguna pérdida para Lorel. Es una elección realmente ingeniosa de posicionamiento. A esa mujer también le habría ido muy bien como comerciante. Si una burócrata así existiera hasta cierto punto en este país también… es algo que me pregunto, en serio”. (Rembrandt)

Sin embargo, no hay duda de que Sairitz no es una persona imprudente en absoluto.

Es fiable y puede trabajar como una buena compañera. Ese es el tipo de persona que es, es lo que Rembrandt reconoció una vez más de ella.

“De todos modos, he hecho lo que tenía que hacer. También he tenido mi oportunidad de presumir. Ahora, sólo tengo que elegir continuamente el camino fino pero correcto. Eso es todo lo que puedo hacer en lo que queda después de todo…” (Rembrandt)

Para no arrepentirse, lo exprime todo.

Antes de que la luz de la habitación se apagara, las últimas palabras de Rembrandt estaban cargadas de ese tipo de emociones.

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-La noche de unos días después de la renovación de la Compañía Kuzunoha.

En la tienda Rembrandt, hay una cantidad de comerciantes reunidos allí que no se puede comparar con ningún momento anterior.

Para la gente que se dedica al comercio en Tsige, una invitación de Rembrandt es en esencia, lo mismo que una convocatoria forzada.

Además, en la redacción de esa invitación, hay una parte que dice: “si es posible, asegúrate de que es el representante que viene”. Ese es el tipo de evento de esta noche.

En el elegante salón, hay una cocina que no pierde en esplendor.

Mirando esto, había muchos comerciantes que no tenían un buen color en su cara.

“Oi, Raidou también está aquí”.

“Eso es obvio, ¿verdad? No ha pasado mucho tiempo desde que hizo su tienda. No puede volver instantáneamente a Rotsgard después de eso. No importa si es el favorito de Rembrandt-san”.

“¿Qué? ¿Así que ya tiene la intención de ganarse el favor? Cambia de marcha tan rápido como siempre, eh”.

“Tú eres uno de los que dice”.

Varias personas enviaban miradas y hablaban en voz baja sobre Raidou que estaba teniendo una charla amistosa en el salón.

Estaban desconcertados por qué Raidou, que no asistía a las reuniones de los comerciantes de Tsige, estaba ahora en este lugar, y también les disgustaba.

En otras palabras, un grupo que no tenía una buena impresión de la Compañía Kuzunoha.

En términos de porcentaje, se trata de un 20-30% de la gente de aquí.

También son personas que persiguen hacer negocios en esta ciudad, tienen ambiciones, son jóvenes y tienen un poco de talento sin ser bendecidos por suficientes buenas oportunidades.

“Bueno, aun así, últimamente estoy siendo derrotado por la Compañía Milliono. No puedo hacer nada en absoluto, en serio”.

“Afortunadamente, estamos siendo bien tratados por el Gremio y los aventureros. Pero la razón por la que ha habido un buen viento soplando hacia nuestro lado también…”

“Como era de esperar, ¿Porque estamos teniendo una buena relación con la Compañía Rembrandt?”

“¿No es lo mismo para todos? Siento que hay un viento diferente soplando”.

“…Hoh.”

“Me gustaría llevarme bien con Raidou a partir de ahora también. No es necesario que nos machaquemos el uno al otro, ¿Verdad?”

“Sería genial si nos dijeras cómo”.

“Por supuesto. Es bastante fácil. También les enseñaré una regla que deben cumplir pase lo que pase. Escuchen bien. Intenta tener una relación sincera con la Compañía de Kuzunoha”.

“¿Kuzunoha?”

El hombre bajó la voz y estaba hablando con alguien que fue un rival de negocios en el pasado.

En la sala donde se han formado grupos de personas aquí y allá, esta es una de las conversaciones que continúa dentro de ella.

Todos tenían un rasgo que compartían en común.

Que de las empresas que se han enfrentado a un crecimiento radical, las personas de aquí son el centro de las mismas.

Esas personas se habían agrupado con sus planificadores, y hablaban de las cosas que habían planeado de antemano.

El nombre de la Compañía Kuzunoha.

Normalmente, sospecharían del plan de la otra parte.

Pero esta noche, las circunstancias son un poco diferentes.

La persona que está haciendo la conversación y la persona que abrió la conversación, sabían que hay algo que respalda a la Compañía Kuzunoha.

Y a diferencia de los jóvenes en ciernes, ellos también saben que Rembrandt es en esencia, el que tiene el control de esta ciudad.

La Compañía Kuzunoha ha abierto recientemente una tienda con una escala increíble.

Por supuesto, esto no puede ser posible sin el apoyo de su entorno.

Es difícil de creer que esto lo haya hecho un joven representante que ni siquiera se queda mucho en la ciudad. Pero Rembrandt incluso cambió el nombre de una calle por el suyo.

Era una verdad clavada.

“E-Entonces, ¿Estás diciendo que el terreno que la Compañía Eleor estaba reteniendo… era para presentárselo a Raidou?”

“Así es. Bueno, fue una apuesta sabiendo que sería de alta ganancia, pero… él construye una tienda de esa escala. Todos, ¿Entienden?” (Representante de Eleor)

“Sí. Honestamente… esa es una broma de la que no me puedo reír”.

“En efecto, es alguien a quien le ha ido bien en esta ciudad, pero es imposible que tenga suficientes ahorros para hacer algo de esa escala. Eso significa que está ganando bastante en Rotsgard también”.

“Yo sólo sé de venta y compra de tierras, pero Raidou-dono pagó la cantidad total cuando hizo el trato. Es una forma realmente inusual de comprar”. (Representante de Eleor)

“¿Insólito?”

“¿Un terreno de esa extensión? Más que llamarlo inusual, es imposible”.

En un lugar ligeramente separado, el Representante de la Compañía Eleor también estaba manteniendo una conversación similar.

Ambos representantes de las Compañías Milliono y Eleor fueron instruidos por Rembrandt para crear una profunda conexión con Raidou por el bien del futuro.

No hay duda de que su profunda conexión con la Compañía Rembrandt ha jugado un gran papel en su reciente éxito.

Las personas que están en este grupo ahora mismo son los comerciantes que sirven como columna vertebral de Tsige, y son personas a las que Rembrandt ha estado prestando una cantidad razonable de atención.

Rembrandt había juzgado que, aunque sea un poco tarde, iban a introducir el tema de Raidou en las conversaciones.

Mirando en conjunto, hay alrededor de un 30% de jóvenes aquí que no piensan en Raidou de buena manera y fueron invitados hoy a esta reunión.

Además, hay empresas especiales que cumplen con una baja cantidad de demandas, y empresas privadas que realmente no tienen mucha ambición; en resumen, actualmente hay alrededor de un 40% de personas en este lugar que no tienen mucho interés en Kuzunoha.

Hay gente que difiere en el tipo de industria y gente que tiene diferentes tipos de clientes, así que aunque estén en el mismo Tsige, es natural que haya un montón de empresas que prácticamente no tienen conexión con la Compañía Kuzunoha.

“…Fuh”. (Raidou)

Aflojando la corbata que no acostumbra a llevar, Raidou coge un vaso del camarero, y se pone a descansar en un lugar ligeramente alejado.

Había muchas miradas que se preocupaban por sus movimientos, pero se contenían y nadie intentaba acercarse a él.

En un lugar donde hay miradas sobre él, Raidou no podía mostrar un comportamiento antiestético.

Se había relajado sabiendo los límites de lo que era.

“A esta hora, Rembrandt-san probablemente esté haciendo la última confirmación con las tiendas de toda la vida eh”. (Raidou)

Alrededor del 10% de los comerciantes de la sala son representantes que llevan mucho tiempo haciendo negocios en Tsige.

Esas personas han sabido hacer frente a la prosperidad de la ciudad y han podido mantener su poder sin difamar su nombre.

En el título y en público, están al lado de Rembrandt. En otras palabras, hay una buena cantidad de empresas que están en la cima.

Poco después de ser invitados, la empresa Rembrandt los condujo a una sala aparte y, por ahora, sólo han podido ver quiénes son los presentes.

Hoy, Rembrandt planeaba revelar los movimientos del Reino de Aion a los comerciantes.

Eso significa que la fase de sentar las bases ya ha pasado.

Pero bueno, la posición de la Compañía Kuzunoha y la participación de la Unión de Lorel no serán reveladas sin embargo.

“…”

Raidou contuvo el suspiro que iba a soltar y se arregló el atuendo.

Y entonces, tras vaciar el vaso que tenía en la mano, volvió a la sala.

Ya es la hora.

A los pocos minutos de haber regresado al lugar donde se reúnen los mercaderes, el anfitrión de esta noche: Patrick Rembrandt, había aparecido con los peces gordos que todo el mundo conoce, y el ambiente del lugar cambió por completo.

Al ver que la cantidad de gente que aparecía aquí era la misma que la que entraba en la sala separada, Raidou frunció ligeramente las cejas.

Porque aunque había escuchado de Rembrandt que había estado hablando con esas personas hasta cierto punto desde hace un tiempo, todavía era un poco difícil de creer que realmente fuera capaz de convencer a todos.

Pero bueno, a los ojos de Raidou, Rembrandt es un hyuman impecable.

En lugar de pensar en los detalles de la charla confidencial que tuvieron, Raidou simplemente mantuvo el asombro hacia Rembrandt.

“…Ahora bien”. (Rembrandt)

Dando las gracias por aceptar la invitación, pronunciando palabras que alababan a cada comerciante por la prosperidad de Tsige, y terminando toda esa charla general, una luz aguda apareció en los ojos de Rembrandt, y comenzó la verdadera charla.

“Tristemente, se ha convertido en una certeza que el fuego de la revolución arderá en el Reino de Aion. ¿Cómo… cómo nos moveremos?” (Rembrandt)

Con un tono interrogativo, el discurso de Rembrandt comenzó.

La revolución en Aion.

La independencia de Tsige.

“…No creo que se haga realidad, pero si es posible… ruego que el Reino, el Imperio y la raza demoníaca no se involucren en este asunto”. (Raidou)

Sintiendo que las palabras de Rembrandt estaban trayendo calor a la sala, Raidou murmuró esto.

Porque ya sentía que ellos también se involucrarían en el asunto.

Este murmullo no era porque no tuviera la resolución, sino porque ya se había resuelto a sí mismo.

¿Cuántas ondas creará esta revolución?

Esto era algo que ni siquiera la Diosa podía predecir su resultado.