Summoned Slaughterer - Capítulo 105

Capítulo 105: Arrastrándose

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Avanzando por el camino que solo tenía recortada la pequeña y simple maleza, llegó a la ubicación de la barrera de inmediato.

“Esta es la barrera, ¿eh?” (Hifumi)

Sobre el camino, hay un agujero del grado en que él puede pasar si se encoge un poco.
Hifumi tocó la barrera con un dedo, pero excepto por una sensación similar a adormecerse un poco, tuvo una sensación como de plástico que se enfrió.

“Parece que se rompería si lo golpeo, pero … bueno, lo dejo para más tarde”. (Hifumi)

Pasa por el agujero rápidamente y sin demora.

Una vez que Hifumi ajusta el lugar de la katana en su cintura, camina hacia adelante, no lentamente, pero tampoco apresuradamente.

El bosque continúa incluso cuando atraviesa la barrera, sin embargo, en comparación con el bosque donde viven los elfos, Hifumi sintió que el aire obviamente se había aclarado. Aunque es natural, no hay cadáveres de elfos en ninguno de los árboles.

“¿Debería ir en línea recta?” (Hifumi)

El camino continúa hacia el exterior del bosque a lo lejos.

Trató de preguntarle a Zanga y Puuse antes de atravesar la barrera, pero los dos no sabían cómo los demonios viven sus vidas o cómo es la vida al otro lado de la barrera.

Hifumi decidió seguir adelante siguiendo el camino “por una razón u otra”. Si hay un camino, tiene que haber alguien que lo use, era el nivel de su despreocupación.

Y después de caminar alrededor de una hora, los árboles se volvieron demasiado escasos para llamarlo bosque y pudo ver a lo lejos. Las partes del bosque se volvieron vagas y antes de que él se diera cuenta la visibilidad mejoró

“Una ciudad … ¿eh?” (Hifumi)

Con el bosque terminando, murallas grises, que parecen estar hechas de piedra, se pueden ver más adelante después de seguir el camino.

¿Es porque todavía hay bastante distancia? Aún no está claro si hay personas o no, pero hay un lugar donde se eleva una parte del muro. Hifumi juzgó que podría ser algo así como una torre de vigilancia por el simple hecho de proteger o una puerta.

“Por el momento iré allí …” (Hifumi)

Justo en medio de decir eso, Hifumi rápidamente se agachó y rodó por el suelo.

Justo al lado de su costado, una bestia con el mismo físico que Hifumi lo atraviesa.

“Un monstruo, ¿eh?” (Hifumi)

En el momento en que se levantó, Hifumi ya estaba agarrando la katana desenvainada en su mano.

El monstruo y él se enfrentan.

Era un monstruo con una apariencia similar a un leopardo que poseía un cuerpo flexible. Sin ninguna intención de ocultar sus afiladas garras, se aferra al suelo con fuerza y presión.

Debido a que el oponente es un monstruo que muestra su intimidación gruñendo, Hifumi dio un paso hacia adelante con su pie derecho y tomó una postura como si empujara la katana a su oponente.

“Parece ser más fuerte que los monstruos alrededor de Orsongrande”. (Hifumi)

Hifumi no pudo sentir su presencia hasta que estuvo bastante cerca para su ataque sorpresa justo ahora.

Si su velocidad hubiera sido un poco más alta, podría haber recibido daño de su primer ataque.

Leopardo, ¿eh? Puede que sea diferente a los hombres bestia, pero me pregunto cómo. (Hifumi)

Una vez que balancea la punta de la katana como si la atrajera, el monstruo hace un gruñido como si estuviera irritado.

En medio de su confrontación, cuando Hifumi de repente levantó la katana en una posición elevada, el monstruo, juzgándolo como una oportunidad, saltó sobre él con sus garras en blanco.

“¿Oh?” (Hifumi)

Fue más rápido de lo que esperaba Hifumi.

Mientras dejaba pasar la pata delantera, que estaba dirigida precisamente a su cuello, avanzando en diagonal, golpeó su mandíbula con el pomo.

“¡Gyan!”

El monstruo, que gimió porque no pudo resistir, intenta tomar distancia corriendo en círculo.

Sin embargo, Hifumi ha predicho eso y sigue adelante en línea recta.

Cuando se pone justo delante de él, abre su gran hocico para atacarlo.

“Por el contrario, ese es tu punto débil”. (Hifumi)

Empuja la katana hacia la garganta del monstruo mientras empuja el pomo con su cintura.

El empuje, que puso la hoja de lado, atravesó incluso el bulbo raquídeo mientras experimentaba poca resistencia.

“Guu …”

El monstruo trató de romper con fuerza la espada de la katana, pero ese fue el alcance de su oposición.

“Adiós.” (Hifumi)

Presionando su pie contra su frente, Hifumi saca la katana.
Colocando un papel sobre la katana manchada de sangre, la limpia de una vez.

La hoja se había frotado contra los afilados colmillos, pero ya había recuperado su brillo original.

“Ya veo. Incluso si dejas a un lado a los demonios, los monstruos también son fuertes, ¿eh? (Hifumi)

Podría ser capaz de divertirme con algo más además de mi objetivo original, Hifumi exhaló por la nariz.

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“¿Eso significa que es posible que aparezca un rey demonio?” (Imeraria)

“Hay tales rumores entre la gente en las calles”. (Adol)

El Primer Ministro Adol evitó la afirmación de la pregunta de Imeraria.

“… ¿No es posible verificar la verdad? ¿O hay algunos problemas? ” (Imeraria)

“No, no hay problemas”. (Origa)

La otra persona que está presente en este lugar abrió la boca. Origa estaba visitando el castillo para ayudar en la investigación de la magia de sellado.

Desde hace varios días en este lugar, ha estado alojada en una posada de la capital.

Los cinco soldados que la atendieron son mujeres. Las medidas de seguridad son extrañamente de bajo nivel para la esposa de un conde. Aunque está el incidente de que ella mató instantáneamente a los matones que fueron contratados por jóvenes nobles que tienen rencor contra Hifumi y, además, ella aplastó a esos jóvenes nobles en una noche, se aseguró de abstenerse de interactuar con otros nobles. Y los nobles de la capital, que la sentían inquietante, tampoco se acercan a Origa.

Por otro lado, dado que ella es la representante del señor feudal de Fokalore, que estaba a la vanguardia en lo que respecta a la industria y el comercio, comerciantes y artesanos vienen a visitarla sin interrupción para saludarla y estudiarla.

Sin discriminación, Origa trató con esos plebeyos y, en ocasiones, incluso les enseñó técnicas valiosas de forma gratuita.

“La esposa del héroe no es una persona común después de todo”.

Es su reputación, pero aunque los nobles y los plebeyos lo dicen de diferentes maneras, no pasó mucho tiempo para que se extendiera ampliamente.

Por supuesto, estas conversaciones también han llegado a oídos de Imeraria.

Sin embargo, ella no toca ese tema.

“Si dices que no hay problemas debe significar que hay alguna razón. ¿Podría dar más detalles? ” (Imeraria)

“Su Majestad, esa forma de hablarme es innecesaria. Si mi esposo es el vasallo de Su Majestad, entonces yo, que soy su esposa, también lo soy “. (Origa)

Debido a que Origa hizo esa declaración sin problemas, Imeraria se sintió decepcionada de que “realmente no lo decía en serio”, pero al menos pudo asegurarse de que esto no se revelara en su rostro.

“Soy alguien que muestra el debido respeto hacia Hifumi-sama. Creo que debería ser lo mismo contigo, que eres su cónyuge. Entonces, ¿te importaría responder a mi pregunta? (Imeraria)

“Mi esposo está investigando a la persona que está detrás de esos monstruos fortalecidos. Además, el ejército feudal de Conde Tohno tiene la intención de dar instrucciones en técnicas de combate a cada nación y área sin escatimar esfuerzos “. (Origa)

“¿La idea de enseñar esas técnicas de combate se origina en Hifumi-sama?” (Imeraria)

“Incluso a países extranjeros … eso también dependerá de si se convertirá en un acto que sirva a los intereses del enemigo …” (Adol)

Adol expresó tímidamente su preocupación por los detalles de los que hablaba Origa como si fueran algo maravilloso.

La respuesta de Origa que confronta esas preocupaciones comienza con una sonrisa.

“Países extranjeros… Vichy y Horant están aprendiendo técnicas de nosotros. Incluso si se volvieron contra nosotros, por el bien de la discusión, es muy posible lidiar con ellos “. (Origa)

“S-Sin embargo, en caso de que apuntasen a otro lugar que no sea Fokalore …” (Adol)

Una vez que Adol menciona el asunto que teme una vez más, la risa de Origa se intensifica.

” Su Excelencia el Primer Ministro no tiene nada de qué preocuparse”. (Origa)

Su tono está lleno de confianza hasta el borde.

“Incluso en tal caso tendremos el privilegio de ayudar con al menos “suficiente resistencia”.” (Origa)

Ella no habla de ganar.

Tampoco dice que Fokalore los suprimirá.

Ella solo garantiza “resistir” a ellos.

“… Entonces, tratemos con eso en cada territorio. Al observar el estado de las cosas, enviaremos el potencial de guerra del país en cualquier momento “. (Imeraria)

“En el momento de hacer eso, el condado de Tohno también cooperará contigo a pleno rendimiento”. (Origa)

Imeraria y Origa sonríen mientras se miran las caras.

“Entonces, continuemos con la investigación mágica”. (Imeraria)

“Si hagamos eso.” (Origa)

Parados juntos, los dos se dirigieron hacia la sala de referencia mientras resonaban los sonidos de sus tacones.
Habiéndose quedado solo, Adol suspiró en el silencio.

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Hifumi, quien se acercó lentamente al lugar que parecía ser una ciudad, notó una batalla en sus inmediaciones.
Acercándose a una distancia para poder observar la situación, se coloca a la sombra de un árbol.

“Demonios, ¿eh?” (Hifumi)

Con el telón de fondo de la pared, alrededor de 30 demonios luchan contra la misma cantidad de monstruos de tipo lobo.

“¡Ooooohh!”

Un demonio notablemente alto se echó al hombro una gran espada larga de aproximadamente la misma longitud que él y se sumergió en la manada de monstruos que lideraban la carga.

Mientras giraba como una peonza y blandía su espada larga al hombro con el impulso de correr, rompió a los monstruos en pedazos.

Con los otros demonios agregando hechizos de fuego y relámpagos, los monstruos, que estaban abrumados por la presión, huyeron en todas direcciones una vez que su número disminuyó a menos de la mitad en un abrir y cerrar de ojos.

Sin perseguir imprudentemente, los demonios masculinos rápidamente confirman el daño y caminan hacia la dirección de la ciudad mientras están atentos a los alrededores.

Una vez que Hifumi miró en la dirección a la que se dirigían, descubrió una puerta, que parecía ser la entrada, en una parte de la pared.

Reflexiona mientras se cruza de brazos.

“¿Su fuerza de lucha es alta? ¿Les llamo desde aquí? ¿O lo haré después de echar un vistazo a la ciudad?” (Hifumi)

Incluso si entré a la ciudad así, requerirá mucho esfuerzo buscar compañeros, que sean capaces de luchar, uno por uno, Hifumi hizo una expresión amarga.

“Escuché que hay varios tipos fuertes aquí … ¿mm?” (Hifumi)

Hifumi, quien notó el aire amenazador, rápidamente sacó su kusarigama.

Los monstruos lobo, que anteriormente fueron repelidos por los demonios, aparentemente cambiaron su objetivo a Hifumi a continuación.
Una manada de alrededor de 10 de ellos rodea a Hifumi.

“Ya veo. Los monstruos de este vecindario son hábiles para borrar sus presencias “. (Hifumi)

Si eso significa que pueden competir despiadadamente con tales monstruos, la fuerza de combate promedio de los demonios podría ser alta, evaluó Hifumi tranquilamente mientras balanceaba el contrapeso de su kusarigama.

“¿¡Bufu !?”

El monstruo que de repente tuvo la punta de su boquilla golpeada por el contrapeso de hierro, se desmaya en agonía mientras brota sangre.

Asegurándose de saltar sobre su camarada que había sufrido el ataque, varios monstruos asaltaron a Hifumi todos a la vez.

La hoz, agarrada con la mano izquierda, golpea la cara de uno de los monstruos entre ellos.

Al atravesar su globo ocular, la hoz que destruyó el cerebro se atasca en el cráneo.

Blandiéndolo como está, Hifumi golpeó a otro monstruo con el cadáver lanzando la hoz. A cambio, tiró del contrapeso y se lo arrojó a otro monstruo.

Hifumi, que había matado a 3 monstruos de una sola vez, avanza desarmado y mata al monstruo, cuya nariz había sido golpeada al principio, pisándole la cabeza.

“… Bien.” (Hifumi)

Sintiendo la retroalimentación, Hifumi se paró contra la parte posterior de un árbol sin tocar la katana en su cintura.

En comparación con el monstruo leopardo de hace un tiempo, son débiles.

“De prisa, no es mi hobby matar animales frágiles, pero …” (Hifumi)

Una vez que mira a los seis monstruos restantes, parece que todavía tienen la voluntad de luchar. Podrían haber juzgado que el nivel de amenaza disminuyó con él desarmado.

“Te entretendré si quieres jugar”. (Hifumi)

Los seis monstruos saltan simultáneamente hacia Hifumi, quien levanta su mano derecha al frente a la mitad de su longitud.

Agarrando la pata delantera de uno de los monstruos que venía mordiéndolo con el hocico abierto, se la lanza a otro monstruo.

Esquivando rápidamente retirando su pie de uno que llegó a arañar su rodilla, llegó a un lugar visible debajo de sus pies y pateó su garganta.

Rodeado de árboles en círculo, Hifumi agarró el cuello de un monstruo que se le acercó y lo golpeó contra el tronco de un árbol.

Con un sonido húmedo del cráneo aplastado, se dirige directamente a la sangre una vez que Hifumi retira su mano mientras cae al suelo.

Otro monstruo lo ataca, pero enderezando el dedo medio y el índice, Hifumi engancha su mandíbula inferior con ellos.

Con su mandíbula dislocada por la fuerza de su propio salto con un * bamboleo *, ladea la cabeza con perplejidad y se pliega así.

El último monstruo apuntó sus colmillos a su cuello desde detrás de Hifumi.

Golpeando la espalda de Hifumi quien voluntariamente había retrocedido, su equilibrio se derrumbó y cayó al suelo. En ese momento, Hifumi golpeó el área alrededor de su corazón.

Tosiendo sangre, el monstruo dejó de moverse.

“Uf …” (Hifumi)

Mientras corrigía su desarreglado dougi, Hifumi exhaló.

“… Entonces, ¿cuál es tu impresión después de observar la batalla?” (Hifumi)

Dándose la vuelta, Hifumi lanza esas palabras a un gran árbol.

“Me notaron, ¿eh? Tienes una habilidad más alta de la que escuché de aquellos llamados humanos … ”

Un hombre de orejas largas, que parece un demonio, apareció entre las sombras del gran árbol.

“Entonces, ¿quieres jugar conmigo también?” (Hifumi)

Eres bastante beligerante. Sin embargo, dejaré eso por ahora “.

Cuando Hifumi murmuró “¿Es así? Qué aburrido”, el demonio masculino le ofreció una sugerencia a Hifumi.

“Humano, no tienes ninguna inclinación a trabajar para nuestro país, ¿verdad?”

“… ¿Ha?” (Hifumi)

Traducido por : Thrashie