Soy un Jefe Legendario - Capítulo 346

Capítulo 346: La Maldición del Rey

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William y sus compañeros se retiraron de la iglesia.

En ese momento, una figura pasó como un rayo y Changli Jiuge fue arrastrado.

Cuando William y sus compañeros corrieron hacia él, se convirtió en un rayo de luz blanco y gritó.

Estaba muerto.

El alma de Changli Jiuge vio que William y sus compañeros se acercaban. Revivió rápidamente en el lugar y dijo en tono asustado: “El monstruo es rápido y feroz. Me atravesó el pecho con sus garras. Ya había muerto antes de tener la oportunidad de verlo”.

William y Lancelot se miraron, entonces dijeron al unísono: “Demonio Nocturno”.

Lautner explicó: “Tengan cuidado, los Demonios Nocturnos son muy rápidos. En la oscuridad, sus índices de daño y defensa son extremadamente altos. Les gusta alimentarse de los corazones. No se alejen del grupo”.

“¿Les gusta alimentarse de los corazones? No me extraña que el Demonio Nocturno se abalanzara sobre mi pecho. ¿Puede alimentarse de la luz blanca?” Changli Jiuge frunció el ceño. Un jugador muerto no dejaría un cadáver. Sus miembros y partes del cuerpo se desintegrarían en luz blanca.

El ataque de ahora se había sentido como experimentar una película de terror en persona. Changli Jiuge estaba tan aterrado que casi se había orinado encima. Se palpó la entrepierna.

¿Por qué estaban mojados sus pantalones?

Changli Jiuge reflexionó y se iluminó.

No podía dejar el juego para limpiar su capsula de juego.

En cambio, dejó que la sensación de calor y humedad se extendiera a sus piernas…

Tuvo que fingir que no pasaba nada.

No era el momento de desconectarse. El Príncipe William podría no estar esperándole para limpiar la cápsula de juego…

William y sus compañeros no sabían que Changli Jiuge se había orinado por miedo. Mantuvieron su vigilancia para rechazar los ataques de los Demonios Nocturnos.

Los Demonios Nocturnos no eran inteligentes. Eran monstruos que se escondían en lo más profundo del Mundo Oscuro.

Poseían notables habilidades de caza y eran mucho más fuertes que los demonios ordinarios.

Cuando William había sido un Cazador de Demonios a tiempo parcial, había sido asesinado por los Demonios Nocturnos muchas veces.

Los Demonios Nocturnos eran bestias mágicas más poderosas que los Jefes de caza de Demonios Épicos y Legendarios.

Lancelot preguntó de repente: “¿A dónde vamos ahora? ¿Esperamos a que la bruja resucite?”

William reflexionó profundamente y negó con la cabeza. “No, tenemos que eliminar el mayor número posible de creyentes de la bruja. Esto aumentará nuestras probabilidades de supervivencia tras la resurrección de la bruja. ¿Sabes dónde se esconden los creyentes?”

“Conozco su paradero, pero aún no hemos hecho nuestros movimientos”. Lancelot asintió. Pensó durante un rato antes de llevar a todos al escondite de los creyentes.

Los jugadores encontraron a Changli Jiuge un poco anormal.

Actuaba como un perro que sacudía la pata mientras caminaba, como si tratara de sacudirse algo pegado a la pata.

Afortunadamente, la situación era precaria. Los jugadores tenían un sentido de la urgencia, así que no le prestaron demasiada atención.

Fatty estaba haciendo una transmisión en directo.

Algunos espectadores que habían pasado por la misma experiencia comentaron: {¡Cielos! esto da miedo…]

[Sí, estaba tan asustado que se orinó. No quería desconectarse, así que mostró un comportamiento extraño]

[Cielos, debe dar mucho miedo]

Muchos comentarios repetitivos aparecieron en la sala de transmisión en vivo.

Fatty contuvo su risa. No quería que Changli Jiuge lo golpeara, así que rápidamente le dio una palmadita a Changli Jiuge en el hombro y le cubrió la nariz. “¡Cielos! Has pisado heces. Apesta, y has manchado mis pantalones”.

“Maldición…” Chang Li Jiuge estaba a punto de maldecir cuando se dio cuenta de la mirada de Fatty. Así que dijo con expresión triste: “No he pisado las heces, pero me he encontrado con un montón de albóndigas asquerosas y podridas”.

Changli Jiuge accedió en secreto al foro y comprobó los comentarios en la sala de transmisión en directo de Fatty. Se sintió aliviado cuando vio que alguien le defendía.

De todos modos, él también era un jugador profesional.

Sería un hazmerreír si la gente supiera que se había orinado de miedo.

La Capital de Kerenza estaba envuelta en una niebla oscura. Todos los hogares de la calle habían cerrado herméticamente sus puertas.

Los guardias de la ciudad ya no patrullaban por la noche. En su lugar, se habían acuartelado como una legión para proteger las residencias de los nobles y funcionarios.

¿Y el palacio?

Cincuenta mil soldados de élite montaban guardia allí.

La ciudad tenía 130.000 soldados estacionados en ella. Después de que la ciudad descendiera a una dimensión alternativa, el rey había desplegado refuerzos de otras regiones a la ciudad.

Pero el alcance de la ciudad era demasiado grande. Esos 130.000 soldados no eran suficientes, y era imposible tener guardias en todas partes.

El Rey de Kerenza era demasiado tímido, por lo que había desplegado muchos profesionales y legiones con capacidad de combate en el palacio para protegerse.

El Cobarde Rey no tenía en cuenta la seguridad de su pueblo. Estaba preocupado por su seguridad, así que ofreció todos sus tesoros para buscar ayuda.

La situación actual era sencilla.

William no podía solicitar la ayuda de las legiones de Kerenza.

Tenían que proteger por la noche a los funcionarios del gobierno, a los nobles y a los miembros de la Familia Real.

Sólo podían salir durante el día para matar a las criaturas oscuras.

Que la ciudad pudiera salvarse o no, dependía de los Cazadores de Demonios que habían recibido la misión.

Lancelot llevó a William y a sus compañeros a un edificio de tres pisos.

“La taberna más grande de Kerenza, y uno de los lugares de reunión de los creyentes de las brujas oscuras”.

Justo cuando habló, la puerta de la taberna se abrió con un chirrido.

Una luz brillante penetró en la niebla e iluminó a la multitud.

William observó que había muchos profesionales dentro, bebiendo, charlando y comiendo carne.

Mientras William y sus acompañantes dudaban, todos los que estaban dentro se giraron y les miraron con los ojos manchados de sangre.

Los jugadores tragaron. Sentían que les miraban incontables monstruos.

Un conflicto pendiente no estalló. Un joven camarero se acercó a la puerta y se inclinó respetuosamente para invitarlos.

William frunció las cejas y se adelantó. “Entremos”.

Un grupo de más de veinte profesionales entró rápidamente. William ignoró a los creyentes de la Luna de Sangre que estaban bebiendo y comiendo carne. Se limitó a golpear la mesa y a llamar: “Camarero”.

“¡Ya voy! ¿Qué bebidas quieren tomar los fuertes profesionales?” Una encantadora mujer con un vestido translúcido se acercó.

Sus ojos eran de color rojo sangre, y no le importaba la presencia de William y sus acompañantes.

William miró las botellas de vino que ella había traído. Estaban llenas de sangre acre. Los creyentes de la taberna no estaban bebiendo vino; era la sangre de los plebeyos.

Lancelot y sus Caballeros del Templo resistieron el impulso de atacar. Lancelot quería ver qué trucos tenían bajo la manga.

William estiró la mano y sujetó la barbilla de la jefa. “¿Dónde está tu maestra?”

“La maestro no ha resucitado. Pero si un hombre tan guapo como tú quiere conocer a mi maestra, puedes quedarte con ella para siempre después de que la ciudad descienda a la oscuridad”. La encantadora parpadeó e intentó agarrar la mano de William, pero el Príncipe retiró el brazo.

William se burló y dijo: “¿Qué pasa? Tu maestra ya había sido asesinado por mí, así que no se atreve a aparecer. ¿Son creyentes de la Luna de Sangre?”

“¡Cómo te atreves!” Gritó la camarera, y los profesionales que la rodeaban se levantaron, desenfundando sus armas.

“¿Qué están haciendo? Sigan bebiendo su sangre”. Una voz apareció de repente.

Todos levantaron la vista para ver a un apuesto hombre vestido de negro que bajaba lentamente del segundo piso.

Este hombre, que estaba envuelto en una sensación de maldad, hizo que todos se sintieran incómodos.

Era el Vizconde de la Oscuridad.

Había aparecido en su verdadero cuerpo como si estuviera en el Reino de la Luz.

Lancelot se sorprendió. Recordó al hombre de negro. Entonces, no pudo evitar mirar a William, que había derrotado al Vizconde de la Oscuridad y le había dado un serio revés.

William también entrecerró los ojos. Efectivamente, el Vizconde de la Oscuridad ya no era un Profesional Épico, sino un Profesional Gran Maestro.

El uso de la magia prohibida por parte de William había provocado un serio revés al Vizconde de la Oscuridad.

Sin embargo, el Vizconde de la Oscuridad había estado cerca de lograr un avance hacia el siguiente nivel.

“Querido Lancelot, he venido aquí específicamente por ti. ¿Me has echado de menos?” Dijo el Vizconde de la Oscuridad, ignorando las miradas de sorpresa de la multitud.

Lancelot sujeto la espada larga en su mano. Si William no estuviera aquí, habría atacado.

El Vizconde de la Oscuridad volvió a mirar a William con expresión de disgusto. “¿Por qué eres tan entrometido? Este es mi juego con Lancelot. ¿Por qué estás involucrado?”

“Había venido a la ciudad para dar una vuelta. Pero, olí tu hedor en cuanto llegué a este lugar abandonado. Inmediatamente supe que eras el responsable de lo que le había ocurrido a la ciudad”. William miró su mano izquierda como si estuviera apreciando un tesoro.

El príncipe continuó. “He oído que tienes la intención de jugar un juego con Lancelot. ¿A qué quieres jugar?”

“¿Oh?” El Vizconde de las Tinieblas levantó las cejas. Desconfiaba de la Mano Izquierda del Dios del Trueno de William y del poderoso Reino del Trueno.

Él sabía que William no usaría la magia prohibida a menos que fuera grave.

Si William activaba el Reino del Trueno, aunque su cuerpo pudiera resistir el ataque, quedaría gravemente herido.

Pero volvió a alzar las cejas y dijo con una sonrisa: “Ya que estás interesado en este juego, te daré algunas opciones.

“La resurrección de la Bruja Oscura de la Luna de Sangre hará que esta ciudad descienda al Mundo Oscuro.

Mátala y salva esta ciudad.

O mata al Rey de Kerenza y salva esta ciudad.”

William se dio cuenta de que el Vizconde de la Oscuridad estaba mirando a Lancelot y a punto de hablar. William intervino y dijo: “Mataremos al Rey de Kerenza.

He estado soportando a este idiota durante mucho tiempo. No desplegó las legiones para ayudar. En su lugar, consiguió que un grupo de Cazadores de Demonios se sacrificara por él. Incluso pidió ayuda a un mercenario como yo. Este cerdo no es apto para ser Rey”.

El Vizconde de la Oscuridad se sorprendió.

Estaba asombrado.

Pero el resto de la gente estaba desconcertada. ¿Cómo podían confiar en el Vizconde de la Oscuridad? Además, William había sido contratado por el Rey humano. Si iba a morir, ¿Cómo podría William reclamar su recompensa?

¿No era mejor matar a la Bruja Oscura de la Luna de Sangre?

¿Podría William estar sufriendo un defecto mental?

Esto fue originalmente un juego jugado por el Vizconde de la Oscuridad y Lancelot.

Porque William sabía que Lancelot era de buen corazón. Incluso si el Rey de Kerenza era un idiota, Lancelot no lo mataría.

Después de algún tiempo, Lancelot se daría cuenta de que no podía matar a la bruja oscura, así que tendría que decidir si matar al Rey y salvar la ciudad…

Era la misma situación complicada en la que la madre y la novia cayeron al agua al mismo tiempo.

Eso era lo que quería el Vizconde de la Oscuridad.

Le gustaba ver a Lancelot en una situación difícil…

¡Si Lancelot matara al Rey, la ciudad seguiría cayendo!

Pero cuando William dijo que quería matar al despreciado Rey Humano…

El Vizconde de la Oscuridad perdió el interés en el juego.

Miró profundamente a William y negó con la cabeza. “No, voy a cambiar el juego. Yo mataré al Rey de Kerenza y tú matarás a la bruja oscura. Quien complete su misión primero, gana.

Si gano, toda la ciudad descenderá a la oscuridad.”

“Eres un pesado por cambiar las reglas”. William frunció las cejas.

“¿Estás de acuerdo?” El Vizconde de la Oscuridad se estaba impacientando.

“Ya está decidido. Vamos”. William dio una palmada en la mesa y se dio la vuelta para marcharse.

Todos seguían en un estado de desconcierto.

Se suponía que debían matar a la Bruja Oscura, pero ahora tenía que morir el Rey de Kerenza.

¿Qué clase de lógica era esa?

Pero después de que William se fuera, habló desde la distancia: “Si el Rey de Kerenza no muere, la Bruja Oscura de la Luna de Sangre no morirá. Ambos tienen que morir al mismo tiempo.

“La primera parte de lo que dijo el Vizconde de la Oscuridad era una broma. No tenía intención de dejarnos ganar.

“No importa lo que pase, esta ciudad descenderá a la Oscuridad”.

Lancelot y Lautner dijeron al unísono: “¿La Maldición del Rey?”

William asintió y dijo: “Sí, es la Maldición del Rey. Después de entenderla, la identidad de la Bruja Oscura de la Luna de Sangre debería ser obvia.

¡Era la Princesa de la Familia Real hace cientos de años!

Alineada con los atributos de la Oscuridad, era particularmente buena en la magia negra desde la infancia.

Pero hace cientos de años, los profesionales que eran buenos en la brujería negra, especialmente las mujeres, eran perseguidos.

Incluso la Princesa fue encarcelada en un sótano oscuro y no se le permitieron visitas.

En su desesperación sin límites, atrajo la atención de un diablo legendario que la afligió con una maldición.

Desde entonces, ella poseía un cuerpo no muerto y poderosas capacidades.

Pero la maldición era la Maldición del Rey.

Mientras un Rey reinante permaneciera en el Reino de Kerenza, ella nunca moriría, ni perdería su poder”.

Sólo podremos salvar a la ciudad de descender a la Oscuridad después de que el actual Rey haya muerto y antes de la ascensión del Próximo Rey”.

Todos se quedaron asombrados por la serie de explicaciones. Cinder Quemado no pudo evitar preguntar: “¿No lo sabía el Vizconde de la Oscuridad?”.

William hizo un mohín y respondió: “No sabía nada. Intervino voluntariamente en el plan de un Legendario Señor de los Demoniso. Aunque sea el Vizconde de la Oscuridad, el Legendario Señor de los Demonios no le diría la verdad.

“Si seguimos las instrucciones del Vizconde de la Oscuridad, no importa lo que hagamos, él destruiría toda la ciudad.

Su juego consiste en observarnos en la lucha por la supervivencia. Nos está engañando y robando el crédito del Legendaio Señor de los Demonios.

Para que no se entere de la verdad.”

“¿Qué se supone que debemos hacer?” Lancelot preguntó.

“Irás al palacio para evitar que el Rey muera prematuramente y evitar que un nuevo rey ascienda al trono. Mataremos a la Bruja Oscura de la Luna de Sangre”. Dijo William a Lancelot.

Después de observar a todos, William dijo: “Prepárense para una batalla épica…”

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Este capítulo se tradujo lo más antes posible gracias a Dantrix7!
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El capítulo 346

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