Shikkaku Mon no Saikyou Kenja

Shikkaku Mon no Saikyou Kenja

ESTADO NOVELA: TERMINADA

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“27,42 segundos – no es bueno”.

Yo, Gaias, murmuré decepcionado.

Lo que está frente a mí es el cuerpo de un dragón que se dice que es el más fuerte del mundo que destruyó tres países, el 『Gran Dragón del Deicidio』.

Su figura aplastada con agujeros quemados tiene casi 20 metros de largo, aún es demasiado grande incluso después de perder su forma original.

Y 27.42 segundos fue el tiempo que necesite para vencerlo.

–Lento.

Por lo que escuché, en un dominio lejano que está aún más lejos que el cielo, llamado 『Espacio』, parece que hay múltiples monstruos mucho más fuertes que este tipo.

Y no son solo dos o tres veces más fuertes. Se dice que su vida y su poder defensivo son cientos de veces más fuertes, miles de veces si hablamos de su poder de ataque. Ligas literalmente diferentes. Perder 27 segundos para este nivel de monstruo significa que no puedo competir con ellos.

E incluso si continúo entrenando para siempre, nunca podré alcanzar a los monstruos espaciales.

Hay dos grandes razones para eso. Una de esas es la『Cresta』 que tengo.

La『Cresta』 es algo que toda persona tiene cuando nace, es el factor más importante para determinar la disposición mágica de una persona, se clasifica en cuatro crestas de acuerdo con su función.

Entre esas, la 『Primera Cresta』 que tengo es la más débil de todas.

¿Por qué es mala dices? Su potencial para crecer es muy corta. La 『Primera cresta』 es la más fuerte hasta que tienes alrededor de ocho años, pero la diferencia entre el poder de la cresta se hace más evidente a medida que envejeces, y una vez que te conviertes en un adulto, el liderazgo que tienen las otras crestas es muy claro .

Si preguntas qué tan malo es, uno de los términos para ingresar a las prestigiosas e incluso todas las principales escuelas de magia es 『No tener la Primera Cresta』. La Primera Cresta es rechazada desde la entrada. Ni siquiera puedes solicitar el examen.

Sin embargo, en este momento me llaman el mago más fuerte del mundo. Hubo ocasiones en las que también me llamaron 『Sabio』 o 『Dios de la guerra』.

Llegué a este punto a pesar de tener la Primera Cresta. Pensé que seguiría creciendo sin cesar.

Incluso si llego al límite extremo del poder mágico, pensé que aún habría formas de lidiar con eso.

Sin embargo, la realidad es cruel.

Ciertamente encontré varias formas de adquirir destrezas de batalla que me superan en este momento.

Sin embargo, cada una de ellas era aplicable a todas 『Menos』 la primera cresta.

La cresta que tengo no me permite crecer más en absoluto.

Me llevó 200 años darme cuenta de que mi crecimiento se había detenido.

Después de eso comencé a investigar sobre 『la forma de cambiar la cresta con la que naciste』.

Esta investigación era extremadamente fácil en comparación con el combate mágico.

Dado que no hay necesidad de predecir al enemigo o pensar en tácticas para lidiar con situaciones.

Por lo tanto, esta investigación fue la investigación más corta que había hecho hasta ahora.

『Cambiar la cresta de un humano es imposible.』

Solo me tomó dos días y dos horas llegar a esta conclusión.

Durante ese corto tiempo, probé que ya no tenía forma de crecer.

Y durante ese tiempo, desafié al monstruo que subyugué hoy para ver si algo sucedería mientras me rendía a medias.

Libere a un monstruo que había sido sellado durante 300 años a propósito y luché contra él.

No pasó nada. Lo derroté, pero como no podía captar ninguna pista de crecimiento, no era más que un trabajo infructuoso.

Sin embargo, todavía es muy temprano para que me dé por vencido.

La cresta de un humano se establece en el momento en que nace, cambiarla después es imposible.

Esto es un hecho probado.

Entonces debería nacer de nuevo.

Ya completé la magia para ese propósito hace mucho tiempo.

Es un arte mágico incompleto que solo permite que uno lleve sus recuerdos intactos a la próxima vida, no pueden elegir con qué cresta nacerán, pero es suficiente mientras tenga mis recuerdos.

Puedo entrenar nuevamente para ganar poder en la próxima vida, e incluso si nazco con la Primera Cresta nuevamente, puedo usar el arte nuevamente.

Solo me tomó menos de dos segundos para solidificar esa decisión.

Usando una magia rudimentaria, esparzo letras, 『voy a reencarnar. Por favor, no me busques. 』A los pocos conocidos que tengo, e inmediatamente activo la magia para reencarnar.

Sin dudarlo, me entrego a la magia que me arrebata la vida.

Rezo para que mi próxima cresta sea cualquier cresta que no sea la Primera Cresta.

Por cierto, la otra razón por la que no podía volverme más fuerte era porque no tenía un amigo que peleara conmigo, así que no sabía cómo pelear en un grupo.

En otras palabras, era un solitario.

– Continua en Shikkaku Mon no Saikyou Kenja capítulo 1 –